El cisma sindical entre los que apoyan las bases del proceso de estabilización de empleo en el Ayuntamiento de Murcia y los que no, arrancó este jueves en el municipio con diversas movilizaciones y recogidas de firmas. Los delegados del SIME, el sindicato mayoritario, recogieron firmas "para evitar el despido de al menos 50 trabajadores, obteniendo una respuesta favorable y de apoyo por parte de los ciudadanos que se han acercado". Desde el SIME recordaron que su objetivo "es hacer reflexionar al equipo de Gobierno" y que reabra el proceso de negociación que ha cerrado de forma "unilateral y precipitada", con objeto de alcanzar un acuerdo y "evitar la imposición por decreto". Esta fuerza sindical recordó que 10 de los 15 representantes de los trabajadores en la mesa de negociación están en contra de lo que se quiere aprobar. El SIME instalará este viernes puntos de información en la plaza del Cardenal Belluga y en la plaza de Santo Domingo.

Por su parte, CCOO y UGT, con varios grupos de interinos no afiliados a estos sindicatos, se concentraron en La Glorieta, frente al Ayuntamiento, para manifestar su desacuerdo con la propuesta del sindicato SIME, que pasa por valorar, explican, con 1,5 puntos el mes trabajado en la categoría objeto de estabilización (con un máximo de 100 puntos) y 1,1 la experiencia en otras categorías profesionales (con un máximo de 55 puntos) y que el criterio de desempate sea la antigüedad total en el Ayuntamiento de Murcia.

Las bases que el resto de sindicatos apoyan valoran con 0,3 puntos el mes, hasta un máximo de 30 puntos, la experiencia en otras categorías y con 1,2 puntos hasta un máximo de cien puntos la categoría de la que se trate, "lo que todos entendemos que se ajusta como un guante a las orientaciones dadas por la Secretaría de Estado de Función Pública, que habla de valorar mayoritariamente la experiencia en el cuerpo, escala, categoría específica de la plaza".

Desde CSIF y ATABAM criticaron la actitud del resto de sindicatos. "Estamos totalmente en contra de las posturas que han tenido después de la negociación tanto SIME, intentando externalizar el conflicto e imponer sus ideas al margen de la negociación, y del uso partidista que ha hecho CCOO y UGT de una concentración espontánea de trabajadores, queriendo así sacar pecho y apuntarse el tanto de una negociación que no les ha correspondido sólo a ellos".