El emblemático Hotel Arco de San Juan continúa con el cartel de ‘Se vende’. El inmueble tiene un precio de once millones de euros y sus dueños no han recibido ninguna oferta ni tampoco han cerrado ningún acuerdo con ningún grupo inversor, explicó a esta Redacción un portavoz de la propiedad.

La misma fuente precisó que «todo sigue igual que antes» y el precio es el mismo que en un principio, negando que se haya producido un acuerdo con un grupo inversor valenciano que habría pretendido hacerse con el hotel por 8,5 millones, como se informó desde el sector inmobiliario dedicado a la compraventa de inmuebles.

El edificio está catalogado por el Ayuntamiento como residencial y hotelero y la propiedad hace años tenía un proyecto de utilizar parte del inmueble en apartamentos turísticos para sortear la crisis económica.

Los dueños decidieron cerrar el establecimiento como hotel y despedir a toda la plantilla esgrimiendo «dificultades que ralentizan el negocio». De hecho, en su momento, se cifró en unos 30.000 euros las pérdidas mensuales. Incluso, el hotel llegó a renunciar a una de sus estrellas, pasando de cuatro a tres, para tratar de conseguir más clientes.

El edificio tiene una larga historia, dado que el anterior marqués de Mondéjar ya fallecido, Nicolás Cotoner y Cotoner, mantuvo una estrecha relación con el rey emérito, Juan Carlos I, al haberse encargado de su formación cuando llegó a España siendo príncipe. Fue también el primer jefe de la Casa del Príncipe y de la Casa Real. Por eso, durante su estancia en la AGA de San Javier, cuando estaba de permiso, el monarca se alojaba en la vivienda que tenía el marqués en la plaza Ceballos.