El nuevo Gobierno del Ayuntamiento de Murcia y el PP se vieron ayer envueltos en una nueva polémica a raíz de la renovación de los consejeros de Aguas de Murcia. Los populares acusaron l alcalde, José Antonio Serrano, y al vicealcalde, Mario Gómez, de «fulminar la proporcionalidad democrática que siempre ha inspirado la composición del Consejo de Administración de Aguas de Murcia». Añadieron que «PSOE y Ciudadanos vuelven a exhibir su tic autoritario al quitar un representante al PP en favor del PSOE pese a que los populares tienen dos concejales más que los socialistas, lo que evidencia que se trata de una decisión arbitraria y sectaria. El PP baja de tres representantes a dos y el PSOE sube de dos a tres». El PSOE invitó al PP a asumir que está en la oposición y a dejar de montar «circos absurdos», indicó el concejal Enrique Lorca.