Efectivos del Servicio de Extinción de Incendios y de la Policía Local de Murcia han tenido que intervenir esta mañana en un nuevo desprendimiento de cascotes de la fachada de la Catedral, cuya plaza del Cardenal Belluga ha tenido que ser acordonada para evitar la proximidad de viandantes y también para que los bomberos pudieran actuar con suficiente espacio. 

Precisamente, los efectivos de Bomberos desplazados han saneado la parte donde se ha desprendido el cascote, además de comprobar el "mal estado" en el que se encuentra la fachada de la Catedral, ya que "se sueltan con facilidad porciones de piedra", por lo que elaborarán un informe "de la situación tan precaria en que se encuentra", según un comunicado del Consistorio.

El responsable de la catedral ha indicado a los agentes desplazados que hace seis meses que están esperando que se resuelva el permiso solicitado para poder reparar la fachada, algo que están deseando acometer.