"Este año decidimos empezar los preparativos a finales de Noviembre, concretamente en 6 tardes, para abastecer la tremenda demanda", afirma Lola Mena, encargada de Cultos y Comunicación de la Cofradía de San Antón, sobre los preparativos de las hornadas de los tradicionales panecillos del santo de este año.

Los 120 kilos, aproximadamente, de masa madre que se venían utilizando los últimos años se han multiplicado este año hasta los 225, para que no ocurra lo de siempre. "Ningún año llegamos a la tarde en el día del santo con existencias", comenta Lola, "y es una pena porque viene gente de todas partes de la Región, algunos incluso para guardarles algunos a familiares de Madrid u otras zonas de España que han oído hablar de la tradición y nos gustaría que todos se llevasen uno".

Por eso este año se ha decidido aumentar con tanta antelación los preparativos, porque con las habituales "dos semanas de no parar", no se llegaba a cubrir la demanda. Varias generaciones coinciden ya en la cofradía, "abuelas, hijas y nietas" e incluso "ya se va atreviendo algún hombre".

"Lo importante es que esta tradición no se acabe", señala Lola, "y que todo el mundo lleve un panecillo en el bolsillo". A ver si, así, no les falta el 'pan' en casa.