Denuncian un vertedero ilegal en pleno casco urbano de Lorca

Como cualquier otro ayuntamiento, el de Lorca cuenta con una ordenanza y con normas de planeamiento que obligan a los propietarios de terrenos, construcciones y edificios a cumplir con lo establecido en la legislación urbanística, a mantenerlos en condiciones de seguridad, salubridad y ornato público, y a realizar las obras y trabajos necesarios para su conservación o rehabilitación. La normativa expresada en la Ley de ordenación territorial y urbanística de la Región de Murcia es clara al respecto: los ayuntamientos pueden ordenar, de oficio o a instancia de cualquier interesado, la ejecución de las obras necesarias para cumplir estas exigencias. Si el obligado se niega, puede ordenarse la ejecución subsidiaria a costa de este.

Pero, ¿qué sucede cuando es la propia administración local la que no cumple con las determinaciones establecidas? Es el caso de un solar de propiedad municipal situado en pleno casco urbano de Lorca, entre el camino Viejo del Puerto y la rambla de las Señoritas, que se ha convertido en una escombrera.

La maleza campa a sus anchas

La parcela, con una superficie de 3.472 metros cuadrados y catalogada como zona verde en el Plan General de Ordenación Municipal, está plagada de maleza al tiempo que se utiliza para el depósito de residuos inertes y basuras. No es el único inconveniente que denuncian los vecinos de la zona, que también se quejan de la carencia de aceras, de iluminación y de pasos de peatones, a pesar de tratarse de una zona muy concurrida, sobre todo por jóvenes y adolescentes, por la proximidad de dos supermercados y de varios restaurantes de comida rápida.

Quejas vecinales

Una de las vecinas que habita en una vivienda próxima al solar relata que siente miedo al ver a los chavales camino a tomar una hamburguesa mientras recorren un arcén minúsculo, pegados a los coches, y casi sin ser visibles para los conductores cuando cae la noche. Otros se preguntan cómo es posible que el ayuntamiento autorizara tantas obras de urbanización para el desarrollo comercial de la zona sin atender a las de su propia competencia. Todos coinciden en que no quieren junto a sus casas un espacio que genera un estado de insalubridad y de mala imagen. Por ello, exigen que se ejecuten las obras de urbanización de esta parcela municipal para que se convierta en una zona verde, que sería la primera con la que contaría el camino Viejo del Puerto en su tramo desde la rotonda de Pérez Casas hasta la RM-11, la vía rápida que une Lorca con el municipio costero de Águilas.

Otra zona verde, en espera

En este mismo tramo de carretera está prevista la construcción de otro espacio verde de 221,37 metros cuadrados que conectaría esta vía con la avenida Adolfo Suárez, tras la expropiación aprobada por el Pleno municipal en julio del pasado año y que afecta a un solar anexo al edificio Princesa. Ambas parcelas podrían convertirse en lugares destinados al ocio y al esparcimiento colectivo si su propietario, el Ayuntamiento de Lorca, decidiera implementar acciones de renaturalización urbana en ellas. O lo que es lo mismo, la recuperación de sus condiciones anteriores a la urbanización.