Habilitan una oficina para atender a los afectados por el soterramiento del Ave de Lorca

En el Centro de Desarrollo Local, CDL, abría sus puertas la oficina de atención a los vecinos afectados por las obras del soterramiento del Ave a su paso por la trama urbana. Las alegaciones de los afectados pueden ser recepcionadas y tramitadas en esta oficina que se sitúa en la sala 3 de la tercera planta de este inmueble en horario de atención al público de 9 a 13 horas. En el mismo lugar los afectado podrán resolver sus dudas sobre el proyecto.

La activación de este servicio de ayuda y gestión se realiza tras la publicación en el Boletín Oficial de la Región de Murcia, Borm, de la resolución de la Dirección General de Planificación y evaluación de la Red Ferroviaria, por la que se abre información pública y se convoca a los propietarios de los bienes y derechos afectados al levantamiento de las actas previas correspondientes al expediente de expropiación forzosa, motivado por las obras del Proyecto básico del Corredor Mediterráneo de Alta Velocidad, Tramo Integración del Ferrocarril en Lorca. Plataforma y Estación.

La información pública tiene como objetivo que los titulares de los bienes y derechos afectados y todas las demás personas o entidades interesadas, puedan formular por escrito las alegaciones que consideren oportunas, de acuerdo con lo previsto en la Ley de Expropiación Forzosa y en el artículo 56 de su reglamento de desarrollo.

El alcalde, Fulgencio Gil Jódar, afirmaba que “ante la necesidad de dar respuesta y soluciones en sus trámites a los vecinos afectados, desde el Ayuntamiento se han dispuesto a la mayor prontitud posible los mecanismos y el personal necesario para ello, a través de esta oficina, que se pondrá a su disposición evitando además desplazamientos y facilitando cualquier información relacionada a todos aquellos que no cuenten con mecanismos informáticos para ello”.

Gil Jódar, anunciaba que entre las alegaciones que presentará el Consistorio estarán las del paso inferior de Santa Clara. “Esta infraestructura se construyó en 2008 y está funcionando muy bien, por lo que nuestras pretensiones giran en torno a que se pueda mantener”.

También aportaba que el diseño de la nueva estación de Sutullena había sorprendido a todos. “No esperábamos que tuviese ese tamaño en superficie. Como también ha sido una sorpresa conocer que habrá un aparcamiento en una importante superficie del corredor verde que se pretendía. Es un tema que queremos ver con los técnicos de Adif”.

Insistía en que el corredor verde se ve, en cierto modo, obstaculizado por las grandes dimensiones de la estación que se acercan hasta la Plaza de Toros de Sutullena. Y anunciaba que pretenden solicitar una reunión al próximo ministro de Fomento para ver con él todos estos detalles. “Nos esperaremos al nuevo Gobierno, ya que el actual está en funciones en estos momentos, pero queremos examinar con minuciosidad todos estos detalles”.

Este domingo, las Biciwomen, visitaban los posibles impactos del nuevo ferrocarril en la ciudad. Al ciclopaseo se sumaba la edil de Urbanismo, María Hernández Benitez. Junto a ellas, realizaban el recorrido integrantes de LorcaBiciudad, Plataforma por la calidad del Paisaje de Lorca y Plataforma Tercia Comunicada. Planteaban “varios aspectos negativos o muy cuestionables que las obras de la línea del ferrocarril están desvelando y que pueden suponer una importante pérdida de oportunidades de desarrollo social, medioambiental y económico”.

Se referían a que el ferrocarril ha sido históricamente una barrera para la ciudad y que continuará siéndolo en la zona central de la trama urbana con la construcción de la estación de Sutullena. La infraestructura multiplica por seis a la vieja estación de pasajeros. Inicialmente se creía que la mayor parte de ésta estaría soterrada. Sin embargo, la recreación del proyecto plantea un espacio de grandes dimensiones que va desde la antigua estación hasta a pocos metros de la Plaza de Toros. A ella, se suma una línea de aparcamientos que ocuparían desde la estación de Sutullena hasta prácticamente el actual paso a nivel de la Alameda de Cervantes.