Las fechas más esperadas en San Pedro del Pinatar

Cada 29 de junio, San Pedro del Pinatar se viste de fiesta para honrar a su patrón, San Pedro Apóstol, en una celebración llena de devoción y alegría. La historia de este santo, discípulo de Jesucristo y pescador en el mar de Galilea, está estrechamente ligada a la fe de los vecinos de este municipio, quienes esperan con entusiasmo la llegada de estas fechas tan especiales, las más esperadas de todo el año.

Las festividades patronales de San Pedro del Pinatar, que se extienden a lo largo de todo el verano con una amplia variedad de actividades culturales, lúdicas y gastronómicas, alcanzan su punto culminante el 29 de junio. En este día, la imagen de San Pedro Apóstol recorre las calles del municipio en una solemne procesión, acompañada por fieles, vecinos, las reinas de las fiestas, autoridades locales y bandas de música.

Estas festividades, que fueron concedidas por el Rey Carlos IV el 24 de octubre de 1796, incluyen una diversidad de eventos. Cada año, los pinatarenses disfrutan de verbenas, fiestas infantiles, conciertos y multitud de eventos lúdicos, la ofrenda al Santo Patrón, el Pregón de las fiestas, veladas troveras, feria de ganado, representaciones teatrales y fuegos artificiales, entre otras actividades.

Uno de los momentos más tradicionales y emotivos de estas fiestas es la Ofrenda de Frutos al Santo Patrón San Pedro Apóstol. En esta ocasión, cientos de pinatarenses ataviados con trajes regionales se unen en un cortejo que recorre las calles del municipio para rendir homenaje a su patrón. Portando hortalizas, frutas y verduras, que luego son donadas a organizaciones benéficas, el cortejo está amenizado por bailes regionales y música, creando un ambiente festivo y entrañable.

Las fiestas de San Pedro del Pinatar representan una oportunidad única para la comunidad local de expresar su fe, celebrar su tradición y compartir momentos de alegría con familiares y amigos. Estos días de fervor y diversión reflejan el arraigo de la historia y la cultura en el corazón de sus habitantes, convirtiéndose en una festividad que reafirma la identidad de San Pedro del Pinatar.