La tradicional ‘Jarra de Novia’ de Lario, la que cuentan se usaba en las bodas para beber el vino consagrado, haciéndolo el cura, los padrinos y los novios, cada uno por un pico y procurando no derramar ni una sola gota, es una de las principales imágenes de la Feria de Mediodía. La Jarra de Novia Lorquina se muestra en dos grandes bodegones de tres metros de altura en la Plaza de España y en la zona de la iglesia de San Mateo. Junto a ella, lebrillos y membrillos, y coronando todo el conjunto dos grandes claveles reventones de color rojo.

A buen seguro estos dos elementos ornamentales se convertirán en el lugar donde posen los visitantes de la Feria de Mediodía. El concejal de Festejos, José Ángel Ponce, detallaba que las piezas han sido realizadas en fibra de vidrio y de tamaño sobre dimensionado. “El bodegón se eleva sobre una peana realizada en madera policromada en la que se instalarán unos vinilos tematizados de las ferias de Lorca. Se han instalado en la Plaza de España y frente a la iglesia de San Mateo”, explicaba en declaraciones a LA OPINIÓN.

No se ha dejado nada a la improvisación en la Feria de Mediodía que este año contará con una “imagen corporativa en consonancia con el diseño de la cartelería”, destacaba Ponce. Operarios trabajaban este viernes en la colocación de los vinilos que ‘vestirán’ las distintas barras de los establecimientos que integrarán la Feria de Mediodía. Cada uno de ellos, exhibiendo el nombre del local. La principal intención, argumentaba el edil de Festejos, es recuperar el encanto de estas celebraciones que están enclavadas en el recinto histórico de la ciudad. Con ese motivo, también se colocaba hace solo unos días medio centenar de jardineras que se adosaban a las farolas de distintas plazas y calles como la de Calderón de la Barca, España y Corredera, entre otras.

Y apenas habían pasado unos minutos desde que se colocaba el primer bodegón, en la Plaza de España, cuando una pareja de novios, Sebastián Parra Trenza y María Kellyda, se fotografiaban. “Cuando subíamos camino del Juzgado para casarnos he visto que estaban descargando la Jarra de Novia gigante y en ese momento he dicho que a la vuelta nos íbamos a fotografiar junto a ella, y aquí estamos, haciéndonos una de nuestras primeras fotografías recién casados en el bodegón de la Feria de Mediodía”, contaba el novio entre risas, mientras algunos de los invitados plasmaban la escena con sus teléfonos móviles.