"Mi lema es hacer el bien y no mirar a quién"

Tomó posesión del cargo el pasado 6 de diciembre, Día de la Constitución Española, en un acto promovido por la Asociación de Vecinos de La Hoya donde recibió el bastón de mando de manos de Conchi Martínez Poveda que, con gran acierto, dirigió los designios de esta pedanía lorquina durante casi cuatro años. Recuerda que su designación se ha debido a la decisión adoptada en su día por el alcalde de Lorca, Diego José Mateos, tras comprometerse con los vecinos de La Hoya para que el pedáneo fuese propuesto por las distintas asociaciones y colectivos que hay en el pueblo, como así fue.

«Para mí supone un gran honor ya que los vecinos se fijaron en mi persona y ello hace que me sienta muy orgulloso aunque suponga una gran responsabilidad», dice emocionado. Asegura que tanto con el alcalde de Lorca como con todos los concejales del equipo de gobierno «me llevo estupendamente, ya que sin conocerme han demostrado ser un gran equipo y como personas, son inmejorables». También tiene elogios para los concejales que integran los grupos de la oposición «a los que he tenido el honor de conocer, siendo mi relación con ellos, maravillosa».

Entre las prioridades del nuevo representante de los vecinos figura el arreglo de la 'curva del Tutuvía' que merece un capítulo aparte en este especial y confía en que pronto comenzarán las obras de mejora previstas. Afirma asimismo que «en un futuro no muy lejano esperamos poder realizar la ampliación de la Avenida Rey Juan Carlos I desde el bar de Andrés hasta el barrio de Vistaalegre y desde la Venta Chicharra hasta la entrada al colegio Juan Navarro».

Entre los proyectos más inmediatos figuran también el de la repoblación de árboles, arreglo de los sistemas de riego y el mantenimiento de parques e instalaciones, entre ellas las deportivas.

Delfín Díaz es un hombre sencillo y afable, que durante el poco tiempo que lleva como alcalde pedáneo de La Hoya, se ha sabido ganar la simpatía y el cariño de sus vecinos. Afirma que «mi vida no ha cambiado para nada ya que sigo siendo la misma persona que era antes de ser designado» y asegura que «mi lema es hacer el bien y no mirar a quién».

Dice también que será un placer acompañar un año más a la Virgen de la Salud en un día tan importante y piensa seguir haciéndolo «ya sea como alcalde o como vecino de a pie». También afirma que «en ningún momento me he arrepentido de haber aceptado el cargo sino que supone un honor poder trabajar para mi pedanía aunque suponga una gran responsabilidad y espero que con el apoyo de todos mis vecinos y del ayuntamiento, este cargo sea mucho más ameno».

Por último anima a los vecinos a tener confianza en que los problemas pendientes por resolver en la pedanía, se van a solucionar.