Sorpresa, incredulidad y consternación. Así reaccionaron ayer los vecinos de Yecla ante la inesperada muerte de su alcalde, Juan Miguel Benedito, de sólo 54 años. El primer edil, del PP, ingresó a las cuatro de la madrugada del martes en el hospital Virgen del Castillo de la localidad por una subida de tensión y nada hacía presagiar el fatal desenlace. La dolencia desembocaría casi doce horas más tarde en el fallo cardiaco que le provocó la muerte.
El director médico del hospital, Godofredo Falomir, señalaba que el primer edil ingresó con una crisis hipertensiva que se le controló poco a poco. «Todas las pruebas analíticas y el electrocardiograma salieron normales, se le realizó un TAC, una ecografía doble y todo estaba correcto». Se encontraba bien, incluso comió, hasta que a las tres y cuarto de la tarde tuvo una parada cardiorrespiratoria. «Se le intentó reanimar durante unos 45 minutos, pero no pudimos hacer nada por su vida», añadió el facultativo
Benedito no había sufrido problemas de salud recientemente y llevaba un estilo de vida saludable. Médico de profesión, seguía una dieta equilibrada y hacía deporte todos los días. El episodio cardiaco que sufrió hace cuatro años, consistente en una subida importante de tensión, le hizo replantearse su estilo de vida y llegó a perder hasta 30 kilos.
El lunes, el alcalde asistió al Pleno ordinario del mes, que abandonó con total normalidad, y los trabajadores municipales supieron que había sido ingresado ayer por la mañana, aunque trascendió que se encontraba bien, medicado y estabilizado.
La muerte de Juan Miguel Benedito ha sido «un duro golpe» para la Corporación municipal, que no salía de su asombro al enterarse de la noticia. Marcos Ortuño, primer teniente de alcalde y que ahora ocupará el sillón de Benedito, señaló ayer que «Yecla no sólo ha perdido un alcalde, sino un gran político. Siempre luchó por la localidad».
Los vecinos acudieron en masa a dar el último adiós al primer edil en cuanto abrió sus puertas la capilla ardiente, instalada en el salón de plenos del Ayuntamiento de la localidad. Sobre las nueve y media de la noche llegaba el vehículo fúnebre a la Plaza Mayor, envuelta en un gran silencio. El féretro fue recibido con un emotivo aplauso que no cesó hasta que entró en el Consistorio, donde familiares, amigos y compañeros de Corporación estuvieron velando el cuerpo ante la triste y atenta mirada de cientos de vecinos que querían pasar delante del alcalde para darle el último adiós.
Quien también se quiso despedir del primer edil y acompañar a la familia en tan duros momentos fue el presidente del Ejecutivo regional, Ramón Luis Valcárcel. «Juan Miguel ha entregado su vida por Yecla con empeño y cariño. No ha sido un político sumiso, todo los contrario. Él lo ha dicho siempre: ´Antes yeclano que del Partido Popular´. Hemos perdido a una gran persona que ha trabajado tanto y tan bien...», se lamentaba Valcárcel. El coordinador de IU-Verdes en la Región de Murcia, José Antonio Pujante, también lamentó en nombre de su organización política el fallecimiento del primer edil.
La ciudad estará tres días de luto oficial, las banderas ondearán a media asta en los edificios municipales y se suspenderán todos los actos organizados por el Ayuntamiento. Yecla llorará al alcalde que la ha gobernado durante los últimos ocho años en el funeral que se oficiará esta tarde a partir de las cinco en la Basílica de La Purísima.
