Como dicen, no hay dos sin tres, ni cinco sin seis. Hyundai sigue en su cruzada eléctrica y presenta en sociedad el nuevo Ioniq 6. Un escalón más. Tras la apuesta por el Ioniq 5 para inaugurar la saga, la marca coreana ha querido dar un giro con esta nueva creación mostrando un modelo tipo berlina con aire cupé, que se aleja del concepto SUV de su hermano. También se aleja de las líneas rectas y apuesta por la fluidez. Llegará a España en 2023 y nos hemos ido hasta Seúl para probar en primicia esta segunda pata de la gama Ioniq. Habrá tercera pata con el Ioniq 7 que ya calienta motores.

En Corea ya se vende, con un precio que ronda los 44.200 euros. Para su aterrizaje en nuestro país se espera que el precio se sitúe ligeramente por debajo del Ioniq 5 (que arranca en algo más de 46.000 euros), lo que permitirá a la marca crear una oferta atractiva en un mercado que necesita un impulso importante para aspirar a colocarse entre los punteros de Europa. 

El Ioniq 6 es un coche de perfil alargado pero no es bajo, lo que se traduce en una buena posición de entrada para el conductor y los pasajeros. Emplea la plataforma E-GMP del Ioniq 5, lo que le permite unas cotas realmente amplias en el interior. Mide 4,85 m de largo, en la línea de un Porsche Taycan, por ejemplo. La distancia entre ejes de 2,95 metros consigue habilitar unas plazas traseras realmente amplias y cómodas. No obstante, su perfil afilado con la caída en la parte trasera deja a las personas de más de 1,80 metros con la cabeza muy cerca del techo. Hay que destacar que los diseñadores del Ioniq 6 no han querido complicarse la vida con el portón trasero ni recurrir a amortiguadores que podrían complicar el diseño de la zaga, y han optado por un maletero con tapa en lugar de portón. De hecho hay dos maleteros, uno detrás y otro más pequeño delante.

Pero si en algo tenemos que destacar al Ioniq 6 dentro de la ‘Liga del diseño’ es la zaga. Simon Loasby, responsable de diseño de la marca nos reconocía que es una de las partes más atrevidas del modelo. Lo preside un alerón elíptico flotante repleto de leds que le confieren un aspecto futurista y deportivo. Es un alerón fijo y curvado que actúa como en los aviones mejorando la aerodinámica. Se trata de una solución innovadora y atrevida. También lo son los elementos del paragolpes delantero que se abren y cierran en función de las necesidades aerodinámicas, permitiendo el flujo de aire.

Dos baterías, tres potencias

Hyundai ha hecho un buen trabajo en adaptación tecnológica y en respuesta eléctrica. Nos ofrecen dos baterías, una de 53 kWh y otra de 77,4 kWh. Con la batería pequeña hay una única versión con tracción trasera de 151 CV que anuncia una autonomía de 429 kilómetros, mientras que con la grande permite una versión de tracción trasera con 229 CV y otra con tracción total de 325 CV en cuyo caso la autonomía estimada es de 614 km. Dispone de cuatro niveles de frenada regenerativa usando las levas situadas detrás del volante.

Muy estable en carretera, en ciudad el comportamiento es bueno, sin demasiadas exigencias. En carretera juega un papel dinámico interesante, con pesos muy bien repartidos y una buena sensación de firmeza y comodidad. Buena parte de su dinamismo hay que buscarlo en el coeficiente de resistencia al aire que se sitúa en un 0,21, de los mejores del mercado en su categoría. El Ioniq 5, sin ir más lejos, acredita 0,29.