Las autoridades surcoreanas han elevado el número de víctimas mortales en la tragedia desarrollada durante la celebración de la fiesta de Halloween, en el barrio de Itaewon de Séul, a 158 después de confirmar el fallecimiento de un soldado el pasado viernes, y el de una mujer en la veintena este domingo.

El militar ha sido declarado en muerte cerebral y ha donado sus órganos, según ha recogido la agencia de noticias Yonhap.

Con esta víctima ascienden a 132 los nativos de Corea del Sur fallecidos como consecuencia de la estampida registrada esa noche y a 26 los extranjeros que perdieron la vida, según ha reportado la Sede Central de Contramedidas por Desastre y de Seguridad.

Hasta el momento, han tenido lugar los ritos funerarios de 130 de estos locales, mientras que 23 foráneos han sido repatriados a sus países de origen.

Según las últimas informaciones, de las 192 personas que resultaron heridas, once continúan recibiendo tratamiento hospitalario.