Al tiempo que intensifica la ofensiva en Ucrania, a la vez que Occidente incrementa sus sanciones, Rusia redobla su acción de propaganda para defender su ataque a un pueblo que considera hermano. La Embajada de Rusia en España es otra productora de argumentos a favor del régimen y contra una "genocida" Ucrania. Basta echar un vistazo a su timeline de Twitter. Su afán es recalcar que Moscú ha sido demasiado "paciente", porque no ha respondido durante ocho años a lo que califica de provocaciones ucranianas. Es decir, que la agresión ha sido inevitable, que no tenía otro camino. Argumentos falsos, como subraya la Comisión Europea, que este domingo propuso prohibir, en el Viejo Continente, las emisiones de las televisiones Russia Today y Sputnik TV y sus filiales, para frenar la "maquinaria mediática del Kremlin".

El mejor resumen de la propaganda de Vladímir Putin lo ejemplifica un vídeo de las creadoras del pódcast 'Espías Rusas' (@laruedadata), que la Embajada en Madrid retuiteó este domingo y que apuntala la tesis de que es Moscú quien se defiende, no quien ataca. "¿De verdad que pensáis que en la cúpula del Estado ruso están festejando por haber optado por la acción militar? ¿Que lo hicieron por ambiciones imperialistas de Rusia?", comienza el vídeo, que muestra a la periodista Jelena Milincic, serbia que sobrevivió al bombardeo de la OTAN en 1999, hablando a cámara.

La UE recuerda, a través de su proyecto EUvsDisinfo, que ninguno de los múltiples informes sobre la situación de los derechos humanos en Ucrania hacen referencia a ningún genocidio

Milincic responde enfatizando que Rusia ha sido "paciente", porque Moscú "insistió e insistió" en que Ucrania respetase los acuerdos de Minsk "que Kiev se negó a cumplir", y tuvo "mucha paciencia", prosigue, "mientras los ucranianos mataban rusos en el país vecino". Se refiere al supuesto "genocidio", 'casus belli' para Putin, cometido por Kiev en los territorios separatistas ucranios de Donetsk y Lugansk, a los que el presidente ruso reconoció la independencia esta semana.

Sin embargo, como incide el proyecto EUvsDisinfo, un equipo del Servicio de Acción Exterior de la UE especializado en la detección y respuesta de las campañas de desinformación del Kremlin, "ninguno de los múltiples informes sobre la situación de los derechos humanos en Ucrania, que publica regularmente el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos", así como los informes de la OSCE, hacen "referencia" alguna a un genocidio en Ucrania.

"Momento de decir basta"

Amnistía Internacional sí apuntó que tanto las autoridades de Kiev como los separatistas del Donbás apoyados por Moscú mantuvieron a civiles "en detención arbitraria y prolongada, sin contacto con el mundo exterior". En algunos casos, las detenciones fueron "desapariciones forzadas", y la mayoría de los detenidos "sufrieron torturas u otras formas de malos tratos". El informe de la organización, de julio de 2016, detalla los casos ocurridos en ese año y en el ejercicio anterior. Pero tampoco se habla de genocidio.

"El balance de fuerzas en el mundo, después del pasado 24 de febrero, nunca será igual", asegura el vídeo, evidenciando la intención de Putin de alumbrar un nuevo orden

Milincic también reproduce la tesis del Kremlin de que en Ucrania "se gestaban cada vez más movimientos nazis, que hacían todo lo posible para matar el pasado soviético en común". "Destruyeron monumentos, símbolos históricos y hasta prohibieron hablar en ruso". Putin, de hecho, justificó el ataque en la necesidad de "desnazificar" el país vecino. La narrativa se remonta a la participación de grupos violentos de extrema derecha en las movilizaciones del Maidán de 2014. Pero el actual presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, cómico de profesión, es rusoparlante e hijo de judíos, y su partido, Servidor del Pueblo, es centrista.

Occidente, según el vídeo de 'Espías Rusas', lleva "mucho tiempo intentando de todas las maneras provocar a Rusia para que ataque a Ucrania" y lleva "meses" escribiendo del "ataque inminente". Y mientras, continúa, Ucrania "siguió bombardeando el Donbás día tras día, sintiéndose poderosa". De modo que no puede "sorprender" que Moscú "reaccione". Milincic recupera asimismo el argumento de que la OTAN "prometió no expandirse y lo hizo sin tapujos" y cada vez está "más cerca" de las fronteras rusas. "Llegó el momento de decir basta", apunta la grabación, para justificar el ataque de Putin el jueves pasado, para "poner freno a la OTAN y a su soberbia imperial". "El balance de fuerzas en el mundo, después del pasado 24 de febrero, nunca será igual", concluye el vídeo, evidenciando que Rusia pretende alumbrar un orden nuevo y recomponer su esfera de influencia.

Los tuits de la Embajada rusa en España arropan la argumentación exhibida en la grabación, y promueven los hashtags #YoConRusia #StopNaziUcrania o #StandWithRussia. Los mensajes de la legación diplomática también repasan las intervenciones militares de EEUU desde la Segunda Guerra Mundial, replican el apoyo prestado por China, califican la invasión de "operación militar especial" (así la llamó Putin) y reproducen las declaraciones del mandatario ruso y de su Gabinete.

Los argumentos utilizados por Moscú y multiplicados a través de sus plataformas son "información basura", como lo definió el alto representante de la UE este domingo en el Telediario 2 de TVE. Por eso la presidenta del Ejecutivo comunitario, Ursula von der Leyen, propuso prohibir las emisiones en Europa de Russia Today y Sputnik para que los medios estatales rusos y sus filiales no puedan "difundir sus mentiras para justificar la guerra de Putin y para sembrar la división en nuestra Unión".