Los carburantes repuntan más de un 2% en la operación salida de agosto

La gasolina y el gasóleo repuntaron de media en la última semana un 2,17 % y un 2,53 %, respectivamente, enlazando su cuarta subida consecutiva con la que regresan a niveles del pasado abril y confirman la presión alcista de los combustibles en pleno arranque de la primera operación salida de agosto.

Según el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que recoge los datos de más de 11.400 estaciones de servicio en España entre el 25 y el 31 de julio, el precio medio de la gasolina se situó en algo más de 1,65 euros el litro, mientras que el gasóleo costó casi 1,502 euros.

De esta forma, ambos carburantes se anotaron su cuarto avance seguido, el cual les hace volver a registros del pasado abril, cuando el litro se mantenía por encima de la barrera de los 1,6 euros, al igual que venía sucediendo desde comienzos de año.

De hecho, los cerca de 1,651 euros que marcó -siempre de media- la gasolina la semana pasada no se alcanzaban desde mediados de abril (semana del 11 al 17).

A pesar de este repunte, la gasolina es un 3 % más barata que hace un año, cuando aún estaba en vigor el descuento de 20 céntimos por litro aprobado por el Gobierno, al tiempo que el gasóleo cuesta un 11,3 % menos.

En comparación con la primera semana de este 2023, en la que todavía se dejaban sentir los efectos de la bonificación en los últimos días de diciembre, la gasolina se ha encarecido un 19,3 % y el gasóleo un 2,9 %.

Si en cambio se observan los datos de hace un mes, el primer carburante es ahora un 3,7 % más caro, y el segundo, un 4,5 %.

A los precios actuales llenar con gasolina un depósito de 55 litros cuesta 90,75 euros, mientras que si se reposta con gasóleo, el precio es de 82,61 euros, lo que supone una rebaja con respecto a hace un año de unos tres euros en el primer caso y de 10,5 euros en el segundo.

Los carburantes presionan al alza

Los precios de ambos carburantes, eso sí, están lejos de los máximos históricos que alcanzaron en junio de 2022, en plena crisis energética provocada por la invasión rusa de Ucrania, ya que la gasolina cuesta un 15 % menos y el gasóleo, un 21 % menos.

No obstante, los analistas advierten de que el precio del petróleo "está listo para subir".

Para el responsable global de materias primas y derivados de Bank of America, Francisco Blanch, las claves de los próximos tensionamientos en este mercado están en Rusia, a la que la debilidad del precio "le está afectando en los esfuerzos bélicos".

También en la OPEP+, "movilizada" para evitar un colapso de los precios, y en la propia acción de EE.UU., "que tiene que reponer reservas".

En esta línea, el estratega de mercados globales de la plataforma de inversión en multiactivos eToro, Ben Laidler, explica que "los recortes de la oferta de la OPEP, la resistencia del crecimiento económico y las esperanzas de estímulo económico de China impulsaron el petróleo".

Inmersos en este escenario, los carburantes en España volvieron a estar por debajo de la media de los Veintisiete de la Unión Europea, donde el precio fue de 1,789 euros el litro de gasolina, y de unos 1,642 euros, el de gasóleo.

Más caros fueron aún en la eurozona, donde el litro de gasolina se pagó de media a 1,847 euros, y el de gasóleo, a más de 1,674 euros.