Estudio ClonsinGap

España tardará 33 años en alcanzar la paridad entre hombres y mujeres

La discriminación entre ambos sexos hace que el país deje de generar 212.179 millones de euros al año

España tardará 33 años en alcanzar la paridad entre hombres y mujeres.

España tardará 33 años en alcanzar la paridad entre hombres y mujeres.

Sara Ledo

España tardará unos 33 años, hasta 2056, en alcanzar la paridad entre hombres y mujeres si se mantiene el ritmo actual, según el índice ClosinGap, elaborado anualmente por PwC. Dos años menos que hace un año, cuando la expectativa estaba en 2058, pero a un nivel similar al del resultado de 2020 por el “retroceso” que supuso la pandemia con el incremento de la tasa de parcialidad y de conciliación en el ámbito femenino. Esto significa, en términos económicos, que por la discriminación existente entre ambos sexos el país deja de generar 212.179 millones de euros al año, el equivalente al 17,6% del PIB en 2021. 

El estudio, elaborado por una plataforma integrada por empresas como Merck, Repsol, Mapfre, BMW, Mahou San Miguel y Solán de Cabras, PwC, CaixaBank, Grupo Social ONCE, Kreab, Fundación CEOE y Telefónica, analiza cinco categorías (empleo, salud, digitalización, educación y conciliación), siendo el empleo y la conciliación aquellas en las que la brecha de género es mayor.

En concreto, en el caso de la conciliación se supera el 50% de brecha de género, después de sufrir una disminución por el covid de la cual todavía no se ha recuperado; mientras que para el empleo es del 32,8%, tras recortar 1,1 puntos porcentuales en un año por el aumento de la presencia de mujeres en cargos de liderazgo en empresas privadas y en una menor brecha en las pensiones. No obstante, en cuanto al empleo precario, si bien han mejorado los niveles, lo han hecho en menor medida para el género masculino que para el género femenino. 

En el caso de la educación y la digitalización la brecha es inferior al 30%, en ambos casos con resultados mejores que hace un año, pero con un agujero en cuanto al acceso a las carreras STEM que mejora pero que todavía mantiene una diferencia del 50% respecto a los hombres. 

El impacto en la salud

La categoría más reducida es la que engloba a la salud y el bienestar (16% de diferencia entre géneros), pero ha sufrido un empeoramiento de 0,4 puntos porcentuales respecto al año pasado debido a al riesgo de pobreza y a la reducción de los años de “buena salud” de las mujeres. “La esperanza de vida de la mujer es mayor que la del hombre, pero la mujer llega peor. Lo que hay detrás son temas relacionados con conciliación y ayuda a terceros que repercute en la salud de la mujer y hace que el índice tenga esa brecha. Creemos que hay mucho de lo que arrastramos que tiene que ver con la conciliación y el empleo más precario”, ha explicado la presidenta de ClosinGap y presidenta europea de Merck Healthcare, Marieta Jiménez. 

De hecho, el análisis recoge una ligera disminución en el tiempo dedicado al ocio para ambos géneros, pero que se reduce aún más en el caso de las mujeres, las cuales ya sufrían, de media, menos tiempo libre respecto a los hombres.