ACS cierra 2022 de la mejor forma, con la mayor cartera de contratos de su historia, con un valor 68.996 millones de euros, un 8,3% más que al cierre de 2021. Esto le ha permitido mejorar sus ingresos un 20,8% durante el pasado año, hasta los 33.615 millones. Ajustando esta cifra al tipo de cambio, la facturación aumenta un 11,6%.
Con todo esto, la compañía presidida por Florentino Pérez logró un beneficio neto de 668 millones, un 66% mayor al del año anterior. La división de construcción aportó un beneficio de 350 millones, mientras la de concesiones y servicios lo hicieron en 194 y 27 millones, respectivamente. "El resultado recoge un impacto positivo por la variación del valor razonable de instrumentos de cobertura ligados a la acción de ACS por valor de 56 millones de euros, netos de impuestos (25%) y provisiones realizadas en el periodo (67 millones de euros), así como la revaloración del “earn-out” por la venta de servicios industriales (65 millones de euros)", aclara la cotizada en el documento enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Norteamérica al frente de los ingresos
Los negocios de ACS se ubican el 53% en Norteamérica, el 28% en Asia-Pacífico, el 9% en España y el 9% en el resto de Europa. Sin embargo, a pesar del porcentaje de la cartera que supone Estados Unidos y Canadá, aporta el 62% de los ingresos. Al contrario que con Asia, que supone el 28% y solo aporta a la facturación el 22%.
El segmento constructor supone casi la totalidad de sus ingresos, 31.433 millones de euros. Esta división ha mejorado en un 21,5% sus ventas frente al año anterior, "gracias a la buena evolución de las actividades tanto en Dragados como en Hochtief, así como por la revalorización del dólar americano", apuntan desde la cotizada. Los ingresos internacionales representan el 95% de la facturación total de la división, con América del Norte y Australia al frente, mientras España solo supone el 4%.