El Real Madrid ofrece a su afición el trofeo de Liga del alirón en diferido

Festejada la consecución del título de Liga, y de la clasificación para jugar la final de la Champions en Wembley, el pasado domingo en Cibeles, el Real Madrid aprovechó los prolegómenos del partido ante el Alavés para ofrecer a sus aficionados el trofeo de campeones de Liga. Un trofeo que recibieron de manos del presidente de la Real Federación Española de Fútbol, Pedro Rocha, el pasado domingo en Valdebebas en la más estricta intimidad, de forma casi clandestina. Los madridistas habían ganado el título en diferido después de ganar al Cádiz y ver cómo el Girona goleaba al Barcelona en Montilivi.

Una celebración caótica

Eso provocó una celebración 'diferente' con los aficionados rodeando ese mismo sábado la Cibeles, que estaba acordonada por la policía, mientras en un Bernabéu vacío los jugadores celebraban el título en el vestuario tras ver cómo se consumaba la derrota de los de Xavi. El club decidió que ese sábado no se celebraba el alirón en Cibeles porque el siguiente miércoles los blancos tenían que jugar la vuelta de la semifinal de Champions ante el Bayern.

El Real Madrid desborda Cibeles con una promesa: volver con la Champions

Y para hacerlo más rocambolesco, la RFEF decidió entregar la Copa al Real Madrid en su siguiente partido, el que tenía que disputar el siguiente sábado en el Nuevo Los Cármenes en Granada. Sin embargo, el club blanco pidió que se descartara esa opción y finalmente se entregó de forma clandestina en Valdebebas el domingo por la mañana, antes de que la plantilla acudiese al Ayuntamiento y la Comunidad para luego llevarlo a la plaza de la Cibeles y ofrecérselo a la diosa.

Así que al final el trofeo de campeones de Liga no había pisado el césped del Bernabéu hasta este martes a las 21:30 horas, momento en que los futbolistas blancos se lo han ofrecido a sus aficionados, minutos antes del inicio del partido ante el Alavés. Además, el conjunto babazorro ha querido honrar a los madridistas formando el clásico pasillo a los campeones, que el público agradeció con una cariñosa ovación. Para estos festejos el club colocó en el centro del campo una lona con el número 36, cantidad de Ligas que acumula ya el conjunto blanco en su palmarés tras ganar la competición doméstica en esta temporada 2023-24. Y la rodeó de 36 figuras con la forma del trofeo de Liga y debajo el año de cada uno de los títulos conseguidos por los blancos. La plantilla blanca se hizo la foto con el trofeo mientras la grada entonaba el ¡Campeones, campeones! al tiempo que giraba las bufandas en círculo.