Fútbol

Victoria con asterisco en ataque

A pesar de cortar su sequía goleadora, el FC Cartagena sigue manteniendo problemas para generar peligro en el área rival

Ante el Real Oviedo, la diferencia entre la primera y la segunda parte, con un hombre más, resulta muy grande

Alfredo Ortuño, que sumó otra jornada más sin marcar, disputa un balón en elchoque del lunes ante el Oviedo.

Alfredo Ortuño, que sumó otra jornada más sin marcar, disputa un balón en elchoque del lunes ante el Oviedo. / Iván Urquízar

Alfonso Asensio

Alfonso Asensio

La victoria del Fútbol Club Cartagena el pasado lunes frente al Real Oviedo fue balsámica en muchos sentidos. Cortó de raíz una racha negativa que se extendía durante dos semanas, cambió la dinámica justo en el momento más indicado para alejar el descenso ante un gran equipo y zanjó la sequía goleadora que arrastraban los albinegros a lo largo de todo un mes. No obstante, y a pesar de que el triunfo significó un gran paso, no debe sacar el conjunto portuario conclusiones precipitadas si quiere lograr el objetivo de la permanencia: el ataque sigue siendo la asignatura pendiente para el tramo final de temporada.

Tres fueron los partidos en los que el Cartagena mantuvo su incapacidad para hacer gol hasta el encuentro del lunes. Leganés (0-0), Real Valladolid (0-2) y Real Sporting (1-0) encontraron facilidades para defender su portería frente a los albinegros, pues la amenaza fue casi inexistente. El equipo de Julián Calero realizó un único disparo a portería en Butarque, tres ante los pucelanos en el Cartagonova y ninguno en El Molinón, sin duda un bagaje insuficiente para conseguir la victoria.

Contra el Real Oviedo, el juego y la elaboración del equipo mejoraron. Los cartageneros llevaron la iniciativa durante la primera parte, pero se atascaron en los metros finales y no consiguieron poner en apuros al meta rival pese al cambio en la punta del ataque con la entrada de Alfredo Ortuño en el lugar de Darío Poveda. Durante los primeros cuarenta y cinco minutos, no hubo tiros entre los tres palos por parte local, continuando una peligrosa dinámica de los últimos partidos. Sin embargo, todo cambió en la segunda parte a consecuencia de la expulsión de un jugador rival.

Además de la actitud del equipo que, si bien era buena, tuvo un impulso notable, el Cartagena encontró con más facilidad los espacios que dejaba un Real Oviedo en inferioridad. Así brotó la ofensiva cartagenera, firmando en el segundo acto hasta quince intentos sobre la meta de Leo Román. Ocho a portería, tres desviados y otros cuatro bloqueados.

Dos de esos intentos se convirtieron en los goles que ofrecieron una crucial victoria a los albinegros y que pusieron patas arriba el Cartagonova, pero no debe el Cartagena echar las campanas al vuelo. El conjunto de la ciudad trimilenaria sufre para crear peligro y también para finalizar las jugadas. Sufrió en la primera mitad para llegar al área y en la segunda para encontrar portería. Aunque logró sus dos goles con a penas tres minutos de diferencia, desperdició el equipo de Julián Calero numerosas ocasiones para aumentar su renta y sentenciar antes el partido.

El cambio en la punta del ataque surtió efecto porque Ortuño participó activamente en el primer gol, pero tanto el yeclano como Darío Poveda continúan alargando su mala racha. Necesita el FC Cartagena la mejor versión de su ataque para elaborar jugadas y la de sus delanteros para hacer los goles que signifiquen la permanencia, virtualmente a tan sólo tres victorias.

La FPFCCT sigue hoy con la venta de billetes a Valencia

La Federación de Peñas del FC Cartagena abre hoy miércoles la venta de billetes y entradas a todos los aficionados albinegros después de una jornada de martes en la que peñistas y abonados se hicieron con sus localidades para el choque del próximo domingo frente al Levante UD.

La apertura a todos los aficionados, planificada desde el inicio del plan de viaje al Ciudad de Valencia, pretende dar un último impulso al desplazamiento de afición cartagenerista, aunque no tendrá ventajas como sí tuvieron los peñistas y abonados. Mientras los primeros se hicieron con el paquete de entrada y autobús por 40 euros y los segundos por 42, los no abonados tendrán que pagar 45 para acompañar al equipo en Valencia.