Jairo Izquierdo, un pilar que se tambalea en el FC Cartagena

No corren buenos tiempos en el Estadio Municipal Cartagonova y, en consecuencia, todo parece peor de lo que es. Una mala circunstancia acarrea otra en una reacción en cadena que no se detiene y que genera el caos en el Fútbol Club Cartagena. Todo se desató con la mala confección de plantilla, a la que siguieron los malos resultados. Con ellos llegaron los nervios en la directiva, los cambios en el cuerpo técnico y la desilusión de una afición que veía los mismos resultados semana tras semana. En un contexto negativo se hace muy difícil extraer conclusiones positivas de los que están sobre el campo aunque realicen un gran trabajo, per1o el caso de Jairo Izquierdo es especialmente llamativo.

Jairo desembarcó en Cartagena después de lograr el ascenso a Primera División siendo un hombre fundamental en el esquema de Míchel en el Girona. Se movió en el costado zurdo de un equipo acostumbrado a vivir en campo contrario y su función se asemejó más a la de un carrilero que a la de un lateral pese a que sobre el papel ese era su sitio. Aunque no cosechó una grandísima aportación ofensiva, con sólo cuatro asistencias, terminó firmando un total de 34 partidos y 2481 minutos de juego.

Con un cartel de lujo, Jairo fichó como agente libre por el cuadro cartagenerista. No obstante, se encontró como único lateral izquierdo de la plantilla. Luis Carrión lo probó en defensa de cuatro en los primeros partidos pero, tras descubrir el potencial desperdiciado y las carencias del equipo en los extremos, decidió adelantar su posición hasta el ataque para recuperar al mejor Jairo. Fue ahí donde comenzó a repartir juego y asistencias en momentos clave de la temporada.

Transitó el canario por una etapa complicada cuando el equipo dejó de ganar durante ocho jornadas consecutivas y terminó siendo el artífice de su recuperación para finalizar la temporada luchando por el play off cuando todo parecía perdido. Fue también gracias a otro invento de Carrión cuando le movió a la banda contraria para sacar de él dos goles y dos asistencias en cuatro jornadas. Su mejor momento cuando más lo necesitaba el Cartagena.

Esa imagen del Jairo determinante es la que echa en falta el Cartagonova esta temporada ya que, en diecisiete jornadas, el tinerfeño tan sólo ha aportado una asistencia. Fue en la segunda jornada y fue irrelevante en la derrota en Andorra. En los otros trece partidos que ha disputado no ha logrado el extremo impactar en los partidos. Ni ha marcado, ni ha asistido en otra ocasión mientras que ha sufrido una innecesaria expulsión por roja directa y se ha perdido otros dos partidos por lesión.

Sus números en nada se parecen a los que logró en el tramo final del curso pasado y su importancia en el equipo ha decaído hasta límites insospechados. Su bajón no se ve reflejado sólo en goles o asistencias, sino que hay otros parámetros que determinan su poca influencia en el juego albinegro. Jairo promedia 0,3 disparos por partido y sólo 0,1 a portería. Sólo seis ocasiones de peligro han llegado desde sus botas y su porcentaje de pase con éxito no supera el 66 por ciento en campo contrario.

Vive un momento complicado Jairo Izquierdo al igual que muchos de sus compañeros en la actual situación del FC Cartagena. De momento, ni Víctor Sánchez del Amo ni Julián Calero se han atrevido a modificar su posición a la banda derecha como sí hizo Luis Carrión para sacar su mejor cara. En defensa de cinco y como carrilero, donde brilló en Girona, se apaga poco a poco Jairo a la vez que su equipo se apaga con él.

Aún con un bajo rendimiento, el futbolista de Tenerife sigue siendo clave para Julián Calero como lo fue para Víctor. Sólo ha pasado por el banquillo en un partido, cuando volvía de lesión, y ha completado la mitad de partidos completos. Atendiendo a su despliegue físico, Jairo suele ser uno de los hombres sustituidos en el tramo final de los encuentros, pero ya acumula 1.203 minutos sobre el césped, siendo uno de los jugadores más utilizados.

El Sporting llegará al Cartagonova en su mejor momento

El Sporting de Gijón llega el próximo sábado al estadio Cartagonova en un momento dulce. Después de ganar al Eldense el lunes por la noche en El Molinón (2-0), la plantilla que dirige Miguel Ángel Ramírez se ha instalado en la segunda posición de la tabla con 32 puntos, a cuatro del líder Leganés, después de diecisiete jornadas. La racha que ha llegado a los asturianos en puestos de ascenso directo comenzó en la undécima jornada. Después de caer en Santander frente al Racing, ha encadenado siete jornadas sin conocer la derrota, en las que ha sumado 15 de los 21 puntos posibles.

Fue de casa, los sportinguistas han sumado tres triunfos y otros tantos empates, habiendo sufrido tres derrotas, frente a Real Valladolid y Racing de Ferrol en las dos primeras salidas, y en la décima jornada en Santander. Después ha ganado a Albacete y Villarreal B, mientras que empató en Alcorcón.

El canterano Gaspar, de 32 años, se ha convertido en el máximo realizador del equipo. Con ocho tantos se ha convertido en uno de los goleadores de Segunda División. Formado en la cantera de Mareo, el gijonés jugó cedido el curso pasado en el Burgos, donde estuvo a las órdenes de Julián Calero, con el que marcó siete goles. Esta campaña, en 16 partidos, ya ha superado los registros al sumar 8 tantos, uno de ellos en el triunfo de la pasada jornada contra el Eldense. El colombiano Otero y el catalán Campuzano, ambos con 4, son las otras alternativas en ataque.

El equipo gijonés también destaca por su eficiente defensa. Solo ha encajado 13 goles y solo hay un equipo que ha recibido menos esta campaña, el líder Leganés, con 9.