Fútbol

La revolución fallida de Javier Recio

El director deportivo del Real Murcia, que en verano hizo hasta 23 fichajes, es el principal responsable de la gran crisis liguera que vive un conjunto grana con grandes deficiencias en su plantilla y con jugadores que no están cumpliendo con las expectativas

Javier Recio en la presentación de Marc Baró y Montoro. | PRENSA REAL MURCIA

Javier Recio en la presentación de Marc Baró y Montoro. | PRENSA REAL MURCIA / ángela moreno

Ángela Moreno

Ángela Moreno

Cortada hace casi tres semanas la cabeza de Gustavo Munúa, el Real Murcia sigue alargando su decepcionante temporada en el Grupo II de Primera RFEF, una campaña en la que, con solo 14 jornadas disputadas, pocos cuelgan ya el cartel de candidato al ascenso al cuadro grana. La llegada de Pablo Alfaro no ha surtido efecto, de hecho, este domingo, frente al Málaga, se encajaba la derrota más dura de la temporada (1-4). Con los murcianistas en mitad de la tabla, a cinco puntos del ascenso pero solo con seis de ventaja sobre el descenso, las miradas se trasladan del banquillo, donde el cambio de entrenador no ha solucionado nada, al palco, especialmente a un Javier Recio que ahora mismo está en el punto de mira de todos.

Es el director deportivo murcianista el gran responsable de la confección de una plantilla con grandes carencias, mal construida en la mayoría de las líneas y con fichajes que llegaron con sueldos galácticos pero que no están dando la talla. Y todas esas fallas, que ya se veían incluso en la pretemporada, se han hecho más evidentes ahora que ya no está Munúa en el banquillo para culparle de todos los problemas deportivos del Real Murcia.

Un trampantojo

Decía Javier Recio en septiembre, que daba un 8 sobre diez a la plantilla, sin embargo, analizando línea por línea al equipo grana, el Real Murcia es un auténtico trampantojo, un equipo que engaña a la vista, con grandes nombres que no encajan entre ellos, con overbooking arriba y con apenas efectivos en defensa, sin velocidad por bandas... Una plantilla que después de 23 fichajes y una inversión que alcanzaría los cuatro millones de euros solo ha podido sumar 19 puntos, quince por detrás del líder Castellón y con catorce menos que el Ibiza. Y eso que solo se han disputado catorce jornadas ligueras.

La dura derrota frente al Málaga (1-4), donde los granas fueron un trapo roto en manos de los de Pellicer, ha sido la gota que ha colmado el vaso, acentuando las críticas contra los jugadores pero también poniendo completamente en la diana a un Javier Recio que, visto lo visto, ha perdido toda la credibilidad de cara al próximo mercado invernal.

Después de gastarse 200.000 euros en finiquitar a Gustavo Munúa, no parece probable que Felipe Moreno dé otro golpe sobre la mesa y ponga en la calle al director deportivo, responsable de una plantilla en la que no hay ni un solo jugador imprescindible y cuyo corto historial al frente de la secretaría técnica de los granas no tiene ni un punto favorable.

No se recuerda una defensa como la que esta campaña tiene el Real Murcia. No solo por la falta de calidad de los jugadores que llegaron en verano sino también por las grandes carencias, con un solo lateral izquierdo puro.

Solo mantuvo Recio a Alberto González, fichando hasta a siete jugadores para la zaga -Hugo Sanz al final acabó saliendo-, pero de esos refuerzos, dos ya están sentenciados por la grada. Uno es el lateral Marc Baró y el segundo es un Marcos Mauro que, apenas ha jugado por las lesiones, pero que los pocos minutos que ha acumulado dejan mucho que desear. Incluso Sergio Santos, que llegaba para ser protagonista en la banda derecha, es otro de los que ha demostrado que no está al nivel de un proyecto nacido con la idea de luchar por el ascenso directo.

No funcionan mejor las cosas en el centro del campo. Tomás Pina es una de las grandes decepciones; Montoro, con un contrato galáctico, calienta banquillo cada semana, y Larrea solo ha jugado cuatro minutos por sus continuos problemas físicos. En esa línea, en la que en verano se descartó a jugadores como Galindo y Julio Gracia, ahora mismo solo se salvan de la quema Imanol, sub-23 al que se le buscó una salida hasta el final, e Isi Gómez. Éste último cayó lesionado el domingo ante el Málaga, por lo que en las tres jornadas que quedan antes del parón, Pablo Alfaro tendrá que inventarse soluciones que no existen.

Sin velocidad por bandas

Se tiró Recio todo el verano intentando firmar a un extremo de garantías que aportara velocidad al equipo, pero no lo consiguió. Y de su incapacidad, los problemas de ahora, con un equipo sin ninguna verticalidad. Está Dani Vega, que no acaba de ser protagonista, y luego aparece un Sergio Navarro que solo ha jugado 9 minutos y al que los aficionados no le ponen ni cara. A ello se une que Pedro León no está al nivel de hace un año y que Carlos Rojas es otro de los fiascos, pese a lo que prometía por su juventud.

Muchos euros, poco gol

Donde no faltan efectivos es en la delantera. Hasta cuatro atacantes tiene el Real Murcia. A Rodri Ríos y José Ángel Carrillo, firmados a golpe de talonario, se suman Iker Guarrotxena y el joven Álex Rubio. Esa delantera a la que muchos pusieron el cartel de temible antes de comenzar la temporada, apenas ha sido protagonista. Ya sea por la falta de verticalidad del equipo o por las graves desconexiones, el Real Murcia solo ha marcado doce goles en catorce jornadas.

El empresario archenero Álvaro Buendía, nuevo consejero del Murcia

El empresario archenero Álvaro Buendía, presidente del Real Murcia Basket, se convierte en nuevo consejero del conjunto grana, según comunicó ayer el club. La entrada de Buendía supone la salida de María del Mar Carrillo, que «renuncia» a su cargo dentro del órgano de control, aunque seguirá ejerciendo de presidenta institucional. Eso sí, la abogada, ya fuera del consejo, representará un cargo totalmente vacío de poder y que hasta hace unos meses ni era reconocido por los estatutos del club, siendo Felipe Moreno, consejero delegado, el verdadero presidente.

Once millones de capital

Por otro lado, el Real Murcia también anunció ayer que se han convertido en capital cuatro millones de los puestos por Felipe Moreno en el club desde su entrada. 

Los granas cuentan ahora con un capital social de 11.377.231euros.