Las cuentas para que Pedro Acosta sea campeón del mundo de Moto2

Pedro Acosta tiene más de medio título de Moto2 en el bolsillo. ‘El Tiburón de Mazarrón’, cuando restan cuatro grandes premios para concluir la temporada 2023, se puede permitir el lujo de no arriesgar ni un ápice. Las cuentas ya le salen en la calculadora. Con 56 puntos de renta sobre Tony Arbolino, es decir, más de dos carreras, el murciano ya puede ser campeón el próximo domingo en el circuito de Tailandia. Para ello se tienen que cumplir una serie de condicionantes. Por un lado, si gana Acosta, el italiano tendría que ser décimo; y por otro, si hace segundo, solo debe sumar un punto, es decir, acabar decimoquinto. Dado el nivel mostrado en Australia y en las últimas carreras por el piloto del Elf Marc VDS Racing Team, parece complicado, salvo avería mecánica o caída, que acabe el italiano más allá del décimo puesto. Por tanto, se trata de una ecuación complicada, pero no imposible, aunque las cuentas ya le salen con claridad al murciano. 

Sumar 44 puntos para no depender de Arbolino

Acosta cuenta en estos momentos con 280,5 puntos por 224,5 de su único rival, que aún tiene la posibilidad de llegar hasta los 324,5 en caso de ganar los 100 que aún están en juego. Tomando como base el peor de los casos para Acosta, éste debería sumar 44 puntos más en lo que resta de campeonato, que son las carreras en Tailandia (29 de octubre), Malasia (12 de noviembre), Qatar (19 de noviembre) y Valencia (26 de noviembre). Sumando 44 más, al campeón del mundo de 2021 en Moto3 también le valdría, puesto que quedarían igualados a primeros puestos (siete cada uno), pero en número de segundos y terceros, el murciano es claro vencedor. 

En el Gran Premio de Australia, Arbolino, de 23 años de edad, se reencontró con el triunfo. Desde Francia, en la única carrera en la que Acosta no puntuó, no había subido a lo más alto del podio. Comenzó la temporada en Portugal con una tercera plaza para en la segunda, en Argentina, ganar. Fue tercero en Las Américas, cuarto en Jerez, primero en Francia y segundo en Italia y Alemania. A partir de ahí entró en un bache y estuvo cinco carreras consecutivas sin pisar el podio, llegando incluso a quedarse fuera de los puntos en Barcelona (17º). En la India fue segundo tras Acosta, solo pudo ser undécimo en Japón y en Indonesia, donde acabó sexto, evidenció una recuperación. Por tanto, el mejor Arbolino, pese a que en entrenamientos aún no ha logrado una ‘pole’ y ha salido bastante retrasado en las últimas pruebas, está de vuelta. Sin embargo, la distancia que ha concedido a Acosta parece insalvable, sobre todo por el rendimiento del murciano, que pese a sufrir una caída en la vuelta de calentamiento en Philiip Island -«el error más vergonzoso de mi carrera deportiva», dijo- ocasionada por el fuerte viento, logró remontar desde la última hasta la novena plaza después de arrancar desde boxes, donde su equipo ‘reconstruyó’ su motocicleta en tiempo récord.  

Una gran regularidad

Pero si algo ha demostrado el murciano esta temporada es que ha aprendido del pasado y se ha convertido en un piloto fiable tanto en carrera como en entrenamientos. Si en la anterior cita en lluvia, en Argentina al inicio del curso, solo fue duodécimo, en Australia mejoró ostensiblemente -«esta carrera nos ha servido para ver que somos competitivos en agua», dijo- pese a que al final de la primera vuelta era vigésimo sexto. Acosta ha sumado esta temporada siete victorias (Portugal, Américas, Italia, Alemania, San Marino, India e Indonesia), ha logrado dos segundos puestos (Jerez y Austria), y ha sido tercero en tres ocasiones (Holanda, Gran Bretaña y Japón). Solo en Argentina (12º), Francia (retirada), Cataluña (6º) y Australia (9º) no ha subido al cajón. Ya confirmado en 2024 para MotoGP con GasGas, el segundo equipo de KTM, solo es cuestión de esperar para que alcance el segundo título de su corta carrera deportiva. En el peor de los casos, con 44 puntos más en cuatro carreras los que debe sumar para salir campeón.