Laura Gil, ‘la gladiadora’ que renace por segunda vez

La jugadora murciana vive un brillante regreso a la selección tras superar una grave lesión de Aquiles

Laura Gil lanza a canasta en el partido de semifinales ante Hungría. | FEB

Laura Gil lanza a canasta en el partido de semifinales ante Hungría. | FEB / dioni garcía

Dioni García

Dioni García

Hace justo un año, el futuro deportivo de Laura Gil Collado (Murcia, 24 de abril de 1992), medallista olímpica en 2016, era una incógnita. Estaba sin equipo y en su tierra natal recuperándose de una grave lesión del Aquiles. Se había puesto en las manos del doctor Juan Francisco Abellán, quien también es el responsable médico de la selección española femenina. Y después de casi nueve largos meses, en diciembre pasado, recibió luz verde para volver a las canchas. ‘La gladiadora’, ante la ausencia de ofertas interesantes en España, se marchó a Francia. Llegó al Basket Landes, que estaba luchando por no bajar de categoría, y poco después ganó la Copa.

Laura Gil siempre ha antepuesto el lucimiento colectivo al personal. Nunca ha firmado estadísticas sobresalientes, pero todos los entrenadores la quieren a sus órdenes porque como dice la legendaria Laia Palau en As, «es nuestro seguro de vida en defensa. Increíble trabajadora y defensora que puede arruinar el día a cualquier pívot rival. Es una luchadora que hace esos pequeños detalles que marcan la diferencia».

La lesión que sufrió en 2022 no fue la primera de gravedad de la jugadora de Murcia en su carrera deportiva. Ya en enero de 2014, cuando militaba en el Rivas Ecópolis, se rompió los ligamentos de la rodilla derecha. Ese verano, nada más salir de la lesión y sin apenas entrenar, el entonces seleccionador, Lucas Mondelo, no dudó en llamarla para disputar el Campeonato del Mundo de Turquía. La murciana tuvo que realizar la pretemporada durante la concentración. Y llegó al Mundial y fue vital en la consecución de una medalla de plata con sabor a oro.

En aquella ocasión Gil volvió más fuerte, como ha ocurrido ahora. Ya lo advertía hace un año en una entrevista con La Opinión: «Espero volver mejor porque al final nunca había tenido tantísimo tiempo para entrenar y mejorar otros aspectos. Ahora me lo he planteado como ocho meses de recuperación del Aquiles, pero también de todo mi cuerpo y mi mente, porque estaba bastante saturada. No sé muy bien cómo volveré, pero mi idea es volver mejor». Y ha regresado siendo determinante en la consecución de la medalla de plata en el Eurobasket, la cuarta continental en su carrera y la séptima con la selección absoluta, con la que ha promediado en el campeonato celebrado en Israel y Eslovenia 10 puntos, 6,8 rebotes, 2,2 asistencias y 1,5 robos en 28:22 minutos de media en cancha.

En muchas ocasiones se había cuestionado a Laura Gil por su problemas para anotar ante el aro rival, y el pasado verano, consciente de ello, se puso manos a la obra para mejorar el tiro. El trabajo que realizó con el griego Kostas Vasileiadis, exjugador del UCAM, Obradoiro y Unicaja, entre otros equipos, en Murcia ha dado sus frutos. «Me ayudó a tener más confianza y a tener un tiro más rápido», admite.

Laura Gil, que ya es una de las históricas del baloncesto español con 148 partidos internacionales -tiene a sólo 10 a una leyenda como Anna Cruz-, ha ‘renacido’ en 2023 como ya hizo en 2014 para seguir siendo talismán. Y es que desde que en 2013 debutó con la absoluta, el combinado nacional sólo se ha ausentado del podio en dos ocasiones, en los Juegos de Tokio y en el Eurobasket de 2021. Además, en su palmarés también tiene cuatro oros y cinco platas con las selecciones inferiores, lo que la convierten en la española con más preseas de la historia del baloncesto femenino.

En el Eurobasket de 2023 que concluyó el pasado domingo con la cruel derrota en la final ante Bélgica, España no sólo volvió al podio, algo que no había conseguido después la pandemia, también obtuvo el pasaporte para el Preolímpico de París 2024, donde Laura Gil quiere ser olímpica por tercera ocasión. Ese va a ser su objetivo esta temporada, mantenerse en las convocatorias de Miguel Méndez, algo que no será complicado de continuar con el nivel actual y de no sufrir una nueva lesión.

Y lo hará jugando en su regreso a la Liga Femenina Endesa con el Perfumerías Avenida Salamanca, donde vivirá su tercera etapa. En la primera, en su estreno como profesional en la 2010-2011, conquistó la Liga y la Euroliga, aunque su papel fue más bien testimonial. En la segunda, entre 2016 y 2020, alcanzó otras dos Ligas y también cuatro Copas de la Reina, además de tres Supercopas. La murciana es uno de los refuerzos de un equipo histórico que afronta un cambio generacional, aunque allí encontrará a dos amigas que también son estandartes de la selección, Silvia Domínguez y Leo Rodríguez.