Baloncesto

De Souza, en su adiós: "Me entran ganas de llorar, pero es la vida"

La jugadora brasileña del Jairis pondrá fin a su carrera en el partido de este domingo

Erika de Souza aplaude a los aficionados del Jairis en su adiós. | JAIRIS

Erika de Souza aplaude a los aficionados del Jairis en su adiós. | JAIRIS / efe

Efe

La brasileña Erika de Souza, veterana jugadora de baloncesto que el sábado disputará su último partido como profesional a los 41 años con el Hozono Global Jairis Alcantarilla, se queda «con todo» lo que hizo en su carrera y no ocultó sus emociones dos dias antes de su adiós. «Me entran ganas de llorar pero es la vida e inicia un nuevo ciclo», dijo entre sollozos.

Erika Cristina de Souza, nacida el 9 de marzo de 1982 en Río de Janeiro, es considerada una leyenda del baloncesto y la internacional con su país tiene en su palmarés el título de campeona de la WNBA que logró con Los Ángeles Sparks en 2002 y el de la Euroliga que obtuvo con el Perfumerías Avenida en 2011, además de un buen número de trofeos nacionales en los países por los que pasó.

Además de España en Brasil y en Estados Unidos De Souza estuvo jugando en Hungría, Turquía y Bélgica.

Ahora, en el Hozono Global Jairis Alcantarilla desde hace dos temporadas, le llega el momento de la despedida y será este sábado a las siete de la tarde en la pista del Perfumerías Avenida de Salamanca, uno de sus ex equipos en la Liga Femenina Endesa.

«Es una semana muy emocionante, con alegría y también con tristeza por ser mi último partido tras 20 años. Me entran ganas de llorar pero es la vida e inicia un nuevo ciclo», declaró en una rueda de prensa que ofreció precisamente para referirse a su punto y final como jugadora.

De Souza ya tuvo la ocasión se recibir el calor de su afición el pasado domingo en el partido perdido por 50-55 ante el Lointek Gernika Bizkaia en el Fausto Vicent de Alcantarilla.

«La gente se quedó en el pabellón y se emocionó conmigo y eso es algo que llevaré siempre conmigo», indicó la jugadora de Río de Janeiro.

Lo de este domingo será todavía más especial por ser la retirada. «Volveré a Salamanca, donde estuve cinco años y también fui allí como rival unas cuantas veces. Quiero disfrutar el partido desde el primer minuto y hasta cuando me suba al autobús», comentó.

Echando la vista atrás Erika valora lo vivido. «Me quedo con todo lo hecho en mi carrera, aquí, en Salamanca, en Valencia, en Barcelona... con personas muy especiales que me hicieron ser quien soy y a las que echaré de menos», manifestó al tiempo que dejó un mensaje de lo que espera que sea su vida a partir de ahora y también aludió a quienes llegarán tras ella.

Planes de ser madre

«Tengo planes de ser madre y estar con mi marido, mi padre y mi abuela, que está mayor. Iré a mi país, donde hay un proyecto de baloncesto en mi pueblo y aquí ahora tienen que venir otras chicas y recorrer el camino que yo ya hice», declaró visiblemente emocionada en varios momentos de la comparecencia.