Fútbol sala

ElPozo Murcia da un cambio de ciclo drástico

Alberto García, Darío Gil y Fernando, los tres últimos canteranos en llegar a la primera plantilla directamente desde el filial, se marcharán gratis el próximo verano de un club que quiere dar un giro

Darío Gil da nombre a un pabellón en la Ribera de Molina | ELPOZO

Darío Gil da nombre a un pabellón en la Ribera de Molina | ELPOZO / dioni garcía

Dioni García

Dioni García

Ya ocurrió con Diego Giustozzi en el banquillo de ElPozo Murcia y volverá a pasar el próximo verano, en este caso, en el segundo curso de Javi Rodríguez. El club murciano prepara un cambio de ciclo drástico, totalmente necesario ante la ausencia de títulos en las últimas campañas. Si en la anterior ocasión fueron algunos veteranos como Xuxa y Pito los que dejaron su sitio, en esta serán los tres últimos canteranos que han ascendido a la primera plantilla directamente desde el filial los que hagan las maletas.

Los tres acaban contrato este próximo 30 de junio y, por lo tanto, se marcharán gratis, sin recibir contraprestación económica la entidad. El molinense Darío Gil, que llegó a ElPozo hace diecinueve temporadas -fue captado en categoría prebenjamín-, se marcha al Jimbee Cartagena, donde se reencontrará con Duda, el entrenador que le hizo debutar en la máxima categoría. El cierre ha aceptado la propuesta del conjunto cartagenero, que le ha garantizado un contrato hasta 2026, poniendo así fin a su etapa en Murcia.

Otro que se marchará libre será el ala sevillano Alberto García. Después de convertirse en una de las joyas de la cantera, en los últimos dos años ha pedido protagonismo en el primer equipo. ‘Mimi’, como es conocido, llegó a ElPozo en 2015 reclutado por Miguel Sánchez para el filial. A sus 25 años de edad, emprenderá en el Valdepeñas su segunda aventura en un club de la máxima categoría.

[object Object]

El molinense Darío Gil inauguró en la Ribera de Molina, de la que es natal, el nuevo pabellón multiusos que lleva su nombre. El acto institucional estuvo encabezado por el alcalde de Molina de Segura, Eliseo García, y el concejal de Deportes y Salud, Miguel Ángel Cantero. Una orquesta de cámara, exhibiciones de patinaje artístico y un partido de hockey sobre patines con el equipo local Molina Panthers fueron parte de los actos.

Y en el club manchego estará acompañado por un compañero de vestuario y amigo como es Fernando Aguilera. El ala granadino, que al igual que los otros dos acaba contrato, se ha comprometido por dos temporadas, según publicó ayer en la web Relevo el periodista Gustavo Muñana.

Llegó a Murcia en 2012, fue el jugador revelación de la liga en la campaña 2016-2017 y elegido en dos ocasiones el mejor joven del mundo por futsalplanet. El de Algarinejo ha estado siete campañas en la primera plantilla y ha llegado a ser el capitán de la misma, un brazalete que ha perdido este curso en favor del brasileño Felipe Valerio.

Las dos últimas campañas de Fernando en Murcia, al que convirtió en estandarte el club tras la marcha de Miguelín, han estado marcadas por las lesiones. A finales del pasado mes de octubre tuvo que pasar por segunda vez por el quirófano por una condropatía del compartimento externo de la rodilla derecha. Su regreso fue a principios de febrero y desde entonces solo ha jugado un partido como titular y diez como suplente en liga.

Dos fichajes y dos renovaciones

Por tanto, los únicos jugadores de la tierra que tienen garantizada su presencia en la plantilla del próximo curso son el veterano guardameta Juanjo Angosto, quien tiene contrato por una campaña más, y el cierre de Librilla Ricardo Mayor, que regresó el pasado verano tras pasar dos campañas en el Córdoba. El murciano ha renovado recientemente su contrato por dos años.

También ha prolongado ElPozo el contrato del brasileño Marcel por una campaña con opción a otra, mientras que también está garantizada la llegada a la portería del portugués Edu Sousa, procedente del Valdepeñas, y del pívot Eric Pérez, catalán que ha militado las últimas campañas en el Real Betis. Ambos llegan a coste cero, el primero porque acaba contrato, y el segundo al ejecutar una cláusula por la que podía quedar liberado este verano.