El reparto de minutos, asignatura pendiente de Luis Carrión

Si se puede sacar un pero a la primera mitad de temporada de Luis Carrión a los mandos del Fútbol Club Cartagena seguramente tenga que ver con el reparto de minutos entre sus jugadores. La que estaba siendo una de las campañas más solidas de la historia del Cartagena en Segunda División se ha visto empañada por las últimas actuaciones en liga, donde no consiguió la victoria el equipo en tres jornadas. El nivel de los tres últimos rivales del equipo, todos por debajo de los cartageneros en la clasificación, no justifica del todo los malos resultados obtenidos y tampoco el factor campo, que favorecía teóricamente al Cartagena con dos encuentros en casa. La fatiga, ineludiblemente, se encuentra entre las principales causas del bajón y los datos atestiguan la escasez de rotaciones del técnico catalán.

Ya había mostrado el Cartagena signos de debilidad física antes de las victorias frente al Eibar y Andorra y también durante estos encuentros -sobre todo este último- a pesar de que terminó ganando ambos a la épica. No obstante, los mismos seis puntos que mereció el equipo más por perseverancia que por juego sumieron a los albinegros en una falsa percepción de su verdadero estado. El equipo estaba muy cansado y el ‘sprint’ final de la primera vuelta iba a evidenciarlo de forma clara.

Nueve titulares contra el Eibar repitieron ante el Andorra y Luis Carrión solo introdujo un cambio para enfrentarse al Villarreal B en la siguiente jornada. El equipo amarillo, consciente de ello o no, buscó los espacios, los contragolpes y llevó a los cartageneros a un ritmo de juego vertiginoso que fue demasiado para los de la trimilenaria. Kiko Olivas cayó lesionado a la media hora de partido después de disputar los tres últimos encuentros completos volviendo de lesión, Jairo a punto estuvo de no terminar el partido por culpa de los calambres y, en líneas generales, el equipo dejó malas sensaciones en el apartado físico.

Tuvo que salir entonces el Cartagena hasta Gijón para jugar contra el Sporting, pero Carrión llevó la lección aprendida del partido anterior. Hasta seis cambios introdujo el técnico catalán en su once para el choque más exigente de la serie, casualmente, donde mejor acabó rindiendo el equipo albinegro manteniendo un valioso empate antes de cerrar la primera vuelta contra el Racing. En casa ante el cuadro santanderino, sin embargo, cosechó el Cartagena la peor derrota del curso hasta ahora víctima, de nuevo, de la falta de rotaciones.

Repitieron titularidad contra el Racing nueve jugadores que habían formado el once de la jornada anterior y cayó goleado el equipo en un encuentro para olvidar. Polémicas arbitrales a parte, el Cartagena no fue capaz de imponer su ley en ningún momento maniatado por las bajas y la fatiga de los que seguían en pie.

El cierre de la primera mitad de campaña y el cambio de año puede venir bien al cuerpo técnico del FC Cartagena para hacer balance de sus aciertos y errores de cara a lo que queda. Son más las conclusiones positivas que se extraen del trabajo de Carrión, pero debe el preparador corregir las negativas para seguir creciendo a la vez que hace crecer al club. Entre las negativas está el reparto de minutos, muy desigual entre dos unidades salvo alguna excepción.

Porteros a parte, la unidad principal del conjunto albinegro incluye a Jairo, Datkovic, Alcalá, Calero, De Blasis, Rico y Musto. Todos ellos acaparan el 86 por ciento de los minutos totales y el 87 por ciento de las titularidades de media. En un nivel intermedio aparecen los Pablo Vázquez, Borja Valle, Ortuño y Sadiku, que entran asiduamente con el equipo con más de 1.000 minutos cada uno. Por último, una nómina demasiado grande de jugadores formada por Kiko Olivas, Delmás, Sangalli, Tejera, Neskes, Jansson, Ferreiro, Arribas, Franchu, Romero y Lee aparece de manera muy puntual para dar oxígeno a los más habituales, una fórmula que ha demostrado ser insuficiente.

En ese aspecto debe incidir Carrión y su cuerpo técnico si quieren volver al rendimiento mostrado en fases anteriores del campeonato y para ello existen dos caminos diferentes: puede recuperar para la causa el técnico a jugadores que no han contado demasiado o puede reformular su equipo con ayuda del mercado invernal. De cualquier forma, el reparto de minutos ha sido, en este primer asalto, el talón de Aquiles del Cartagena y lo que ha generado un bajón que no quierenvolver a experimentar en el Cartagonova.