Un comunicado lanzado en las redes sociales por el CD Algar, donde informó que el ayuntamiento de Lorca se había puesto en contacto con el club para ofrecerle el estadio Artés Carrasco para disputar la eliminatoria de Copa del Rey ante el Celta de Vigo, generó ayer una polémica que provocó la rápida reacción de la alcaldesa de Cartagena, Noelia Arroyo, quien garantizó que el encuentro se disputará en el municipio, ya sea en las instalaciones del campo Sánchez Luengo o en el estadio Cartagonova.

Hasta el momento, debido a que en las fechas en las que se disputará el encuentro, el 12 o el 13 de noviembre, está prevista la resiembra del estadio municipal donde juega sus encuentros el FC Cartagena, los responsables del equipo de Preferente Autonómica se habían puesto en alerta ante la imposibilidad de utilizar la instalación. Pero después del comunicado lanzado por el club, que no reflejaba que en Lorca también estaban dispuestos a pagar los autobuses que fueran necesarios para que viajaran los aficionados, la alcaldesa ya envió un mensaje en la madrugada del martes al miércoles al presidente para que a primera hora se pusiera en contacto con él. Y así ocurrió. Durante la charla, el máximo mandatario del equipo pidió a Arroyo un documento del Ayuntamiento donde quedara acreditado el compromiso verbal que le expuso en la conversación. También han pedido a la Federación Española las partes implicadas que el choque se aplace al 30 de noviembre, pero esa solución parece inviable puesto que en esas fechas ya estará en marcha el Mundial de Qatar.

«No vamos a permitir que el partido se juegue fuera del municipio de Cartagena», dijo ayer Arroyo, quien expuso la posibilidad de disputarse en el «Sánchez Luengo si reúne las condiciones que, de momento, no tengo ningún documento donde la Federación me diga que es así porque, precisamente, estas competiciones se juegan en esos barrios y diputaciones para acercar los equipos de Primera y para que sea un acontecimiento histórico. Pero está claro que se jugará en el Algar o en el estadio Cartagonova», recalcó la alcaldesa, quien también informó que «tomaremos la decisión antes del viernes -mañana para el lector-» y que el Ayuntamiento acometerá las mejoras que sean necesarias en el Sánchez Luengo en caso de no encontrase otra solución «Las consecuencias colaterales derivadas de la celebración del partido las tendremos que asumir en las mejores condiciones. El estadio Cartagonova es municipal y todos los aficionados del Cartagena queremos que el Algar juegue en nuestra ciudad un partido tan importante», terminó diciendo.

Horas después, el CD Algar emitía otro comunicado a través de las redes sociales. En el mismo agradecía al Ayuntamiento las gestiones realizadas «para conseguir que nuestro partido se dispute en el Estadio Municipal Cartagenova» pese a que la alcaldesa había dejado la puerta abierta a que se celebre en el Sánchez Luengo. A continuación aclaraba la directiva que «reconocemos que en ningún momento ha habido negativa del Ayuntamiento a permitirnos jugar en el estadio», reconociendo que «la impaciencia e inexperiencia nos ha llevado a tomar decisiones equivocadas». Para cerrar, afirmaba el club que el «partido se disputará en el Cartagonova y estamos en conversaciones con el conjunto vigués para encontrar la fecha más adecuada», algo en lo que también tendrá que estar de acuerdo la plataforma televisiva que emitirá el partido.