Fútbol

La oscura temporada de Pablo Vázquez en el FC Cartagena

El central no progresa en su segunda temporada como albinegro y ha pasado a ser la cuarta opción en defensa para Carrión

El central Pablo Vázquez durante un entrenamiento del FC Cartagena esta temporada.  | PRENSA FC CARTAGENA

El central Pablo Vázquez durante un entrenamiento del FC Cartagena esta temporada. | PRENSA FC CARTAGENA / Alfonso Asensio

Alfonso Asensio

El defensa central del Fútbol Club Cartagena, Pablo Vázquez, pasa por su peor momento desde que llegó al club albinegro. Su error del pasado domingo en el Estadio de Gran Canaria le supuso la primera expulsión como futbolista del cuadro cartagenero y condujo a los suyos a una difícil situación que terminó con la más cruel de las derrotas en el tiempo de descuento. Lo preocupante de la situación que vive el valenciano es que no parece ser un hecho puntual y sí consecuencia de un bajón de rendimiento en su segunda temporada en la ciudad portuaria. Pablo ha pasado de ser el jefe de la defensa a la última opción en la retaguardia de una temporada para otra y el FC Cartagena suspira porque vuelva al nivel que maravilló a la parroquia albinegra.

En un lapso de nueve minutos ante Las Palmas vio Pablo Vázquez la misma cantidad de tarjetas amarillas que en toda la temporada anterior, síntoma inequívoco del mal momento de forma que atraviesa el de Gandía. La caída del zaguero es más sorprendente debido al enorme nivel mostrado en la pasada campaña, la de su debut en LaLiga Smartbank, con actuaciones que le convirtieron en uno de los jugadores más destacados de Segunda División y en el mejor defensor del equipo relegando a David Andújar al ostracismo. Llegado de Segunda B, al central le costó entrar en el equipo, pero una vez lo hizo, no volvió a salir y disputó 33 partidos completos de los 34 que restaban hasta final de temporada.

Como medida de garantía, el FC Cartagena incluyó en el contrato de Pablo una cláusula de renovación si disputaba 25 partidos de liga, una marca que daría cuenta de su importancia para el esquema de Luis Carrión. Cumplió sobradamente ese registro, renovó automáticamente y facilitó la planificación de la temporada siguiente, no obstante, su gran año despertó el interés de varios equipos de España y del extranjero que podían mejorar sus pretensiones económicas y deportivas. No escuchó a ningún otro club el central y eligió quedarse en Cartagena sin pensarlo. Para su castigo, el comienzo de su segundo curso como albinegro poco está teniendo que ver con el primero.

Comenzó la pretemporada y Pablo Vázquez postuló a la titularidad entre entrenamientos y encuentros amistosos, sin embargo, la amenaza sobre su papel en el once creció con el buen nivel de Alcalá y Datkovic sumado al fichaje de prestigio de Kiko Olivas, procedente del recién ascendido Real Valladolid. El último incorporado no pudo iniciar el curso por lesión y Vázquez continuó en el once acompañado de Alcalá y Datkovic, pero quedó señalado en acciones individuales y salió del once cuando Kiko estuvo de nuevo disponible sumando seis jornadas consecutivas en el banquillo sin disputar ni un solo minuto. Después de regresar con una buena actuación contra el Ibiza, de nuevo por lesión del malagueño, su partido en Las Palmas volvió a oscurecer su futuro en el equipo.

El zaguero, expulsado en tierras canarias por doble amarilla tras dos entradas a destiempo, no podrá jugar este fin de semana contra el Granada, su exequipo, lo que complica el plan de Carrión. Kiko Olivas regresa de lesión y podría no estar preparado al cien por cien para jugar el partido completo mientras que Datkovic se mantiene en el lateral izquierdo a buen nivel y su vuelta al centro de la zaga haría cambiar todo el sistema obligando a Jairo Izquierdo a retrasar su posición a la línea defensiva. El canterano Farru, por otra parte, supone una opción viable, pero algo arriesgada, ya que el de Lorca aún no ha debutado en Segunda División con el equipo cartagenero.

El Cartagena, entre los 39 en contra de la nueva Ley del Deporte

El fútbol español está en pie de guerra ante la nueva Ley del Deporte. Tras el informe del Congreso se descubrió que el proyecto de Ley para la Ley del Deporte consensuado por PP y PSOE no protegía la viabilidad del acuerdo entre LaLiga y el fondo de inversión CVC y que, por tanto, ponía en riesgo las inversiones y la sostenibilidad de negocio de muchos clubes, que ya han utilizado parte del dinero adelantado por CVC.

Ante ello, los clubes se unieron en un frente común para pedir que se recogieran tres enmiendas principales: la seguridad jurídica del acuerdo con CVC; el ‘no’ a la Superliga; y la conservación del artículo 46 de la ley vigente, según el cual, el CSD requiere de informe previo y favorable de LaLiga ante cualquier modificación de la normativa de la RFEF. No obstante, la propuesta fue presentada al Congreso y debatida ayer en la Cámara Baja ignorando las peticiones de la entidad presidida por Javier Tebas y de los 39 clubes de Primera y Segunda División interesados -entre los que no figuran Real Madrid, Barcelona ni Athletic Club-.

Es por ello que el grupo de 39 clubes se reunirá mañana jueves en una Asamblea en la sede de LaLiga para decidir las medidas a tomar, entre las que se encuentra un posible parón de la competición.