La victoria que consiguió el UCAM Murcia ante el Sevilla Atlético la jornada pasada levantó el ánimo de un equipo que estaba por los suelos. Inmersos en el descenso, cualquier alegría se celebra con mucho más ímpetu. Logró una victoria fuera de casa seis meses después con la imagen más sólida que ha mostrado el equipo murciano en toda la temporada.

Decía Ballesta en la previa del encuentro de hoy ante el Villarreal B (12.00, Fuchs Sports) que en las últimas semanas estaba viendo un equipo de verdad, con la moral y la confianza para darle la vuelta a la tortilla. Consiguió una victoria de mucho mérito y puede que sirva como punto de inflexión.

Esta jornada tienen un encuentro ante uno de los cocos de la competición. Y es que, el Villarreal B, ha monopolizado casi desde el inicio de competición el liderato del Grupo II en la Primera RFEF.

Tuvo un inicio arrollador, con ocho victorias en nueve partidos. Un inicio que nadie pudo seguir. Pero poco a poco, han ido perdiendo fuelle los jóvenes de la cantera grogueta hasta tal punto que visitan el BeSoccer La Condomina terceros en la tabla, inmersos en una crisis de resultados.

Si hay un momento para enfrentarse a una de las plantillas más talentosas de la liga es este. Los amarillos solamente han conseguido ganar dos de sus últimos siete partidos y han visto como Atlético Baleares y Albacete le han pasado por encima, gracias a un rendimiento menos espectacular, pero más regular.

Aún así, no se fía Ballesta de un Villarreal con jugadores «con proyección de Primera División» Deben seguir en la dinámica de las últimas semanas y dar continuidad al resultado de la semana pasada, pues otra victoria de forma consecutiva, ante un equipo de esta entidad, sería un golpe anímico muy alto para afrontar la recta final de un exigente calendario que espera por delante al UCAM, donde tiene que jugar contra todos los equipos que están en play off.

Tendrá Salva Ballesta la baja de uno de sus principales futbolistas desde que desembarcó en la entidad universitaria. Francesc Fullana no estará disponible por acumulación de tarjetas amarillas. El catalán había sido un fijo hasta ahora en el once, formando un doble pivote junto a Armando Corbalán.

No está preocupado el técnico, pues tiene «opciones de garantía» ante cualquier baja. Lo más normal es que Mario Abenza ocupe la posición de mediocentro, pero el murciano no cuenta con la total confianza de su técnico. Juegue quien juegue, tendrá que dejarse la piel ante un equipo herido que querrá recuperar la dinámica ganadora.