Después de la debacle sufrida ante el Gipuzkoa, el vestuario del UCAM Murcia dio un paso adelante el pasado lunes. Los jugadores, en una iniciativa interna, mantuvieron una reunión, sin presencia del cuerpo técnico, según desveló ayer en rueda de prensa Askia Booker «Tuvimos una reunión de jugadores, sin los entrenadores, para hablar entre nosotros, identificar qué nos ha pasado y estar preparados para el siguiente partido», explicó el estadounidense, quien hizo hincapié en que «tenemos que jugar como equipo, que a lo mejor es lo que no hemos hecho en el último partido». A nivel personal admitió que «no estoy feliz con la manera en que jugué contra Gipuzkoa. Es un tema mental, no es nada físico, así que tengo que rectificar. El equipo que se presentó ante el Gipuzkoa es irreconocible, no puede volver a pasar. Tenemos que jugar todos a una», enfatizó.