A nadie se le escapa que el FC Cartagena está viviendo uno de los momentos más relevantes de los últimos seis años. Mañana domingo se juega el ascenso en Majadahonda, con la ventaja del 2-1 del partido de ida en esta eliminatoria de ascenso de campeones de grupo. Todos, desde el presidente hasta el último aficionado cartagenerista, afrontan con tensión y nerviosismo los instantes previos al envite que se jugará a partir de las doce del mediodía en los campos de fútbol de Cerro del Espino.

El entrenador, Alberto Monteagudo, vive su particular trayecto con todas las miradas puestas en cómo y qué prepara para este encuentro.

«Se ha dado que el domingo podamos hacer historia y eso es algo único en la vida de un futbolista y un entrenador. Es como cuando juegas al pañuelo y lo coges, y ya puede tirar el otro que eso no se te escapa. Eso es lo que tenemos que hacer el domingo», explicaba el preparador en la rueda de prensa previa al partido del domingo.

«Es el momento esperado por todos por los directivos, los jugadores, los técnicos y los aficionados, por lo que llevamos peleado tanta gente desde que llegamos. Nos firmaron para vivir este momento y la plantilla se configuró para esto. El domingo podemos hacer historia y es un momento único», añadía el preparador en una de las ruedas de prensa en las que menos se habló de lo que puede pasar sobre el terreno de juego y más de lo que cada uno espera.

Dice que ansiedad no tienen, pero que están deseando que llegue el encuentro cuanto antes: «Hay ansiedad por jugar, no en lo futbolístico. Tenemos que atacar donde más sufren y salir con ese punto de intensidad y agresividad, como hicimos el pasado sábado, que hizo que un equipo bueno como nosotros fuera aún mejor, especialmente en la primera media hora».

Para Monteagudo no cabe otra que no sea ir a por el partido desde el inicio: «Vamos a buscar el gol, sea uno, dos o más. Intentaremos marcar y hacer las cosas a nuestra manera. Si salimos a empatar perderemos».

Explicaba el entrenador que una vez que ha podido valorar al rival y jugar el partido de ida, ha podido descansar mejor que en las semanas previas: «He dormido mejor que la semana previa al Écija. Tengo buenas sensaciones porque creo que a este equipo ya le toca ascender. Tenemos claro lo que tenemos que hacer, ya conocemos al otro equipo no solo por los videos, también por el encuentro ante nosotros».

El preparador hizo balance de los dos años y trató de argumentar cuáles son los motivos por los que este Cartagena debe estar ya en Segunda División. «Llevamos dos años haciendo las cosas muy bien. Hemos sido campeones por derecho propio, hemos pasado muchos años sin poder cambiar de categoría, el club está saneado gracias a la directiva, la gente quiere venir porque huele a otra categoría. Nos falta lo más importante, que la pelota quiera entrar y que el fútbol nos dé ese puntito o ese detalle que hace que cambies de categoría».

Cree que su plantilla no se suele poner nerviosa cuando afronta momentos importantes como éste. «Los futbolistas están concienciados de lo que nos jugamos. Están tranquilos en el día a día y los veo enchufados. Hay futbolistas que nunca han estado en Segunda y se juegan mucho el domingo. Cada uno tiene su historia y ve la posibilidad de cambiar de categoría. Lo quieren coger y si Dios quiere lo vamos a conseguir» indicó. «Hemos preparado el partido muy bien. Los jugadores lo tienen claro, que es lo más importante. La actitud y el trabajo está hecho. Ahora falta conseguir ser mejores que ellos», subrayó.

Confesaba Monteagudo que un ascenso en el aspecto personal es un objetivo por el que ha luchado años. Desde su debut en 2008 con el Lucena, el preparador aguarda que se dé una circunstancia como la que puede vivir este domingo. «Personalmente, ascender sería conseguir algo por lo que llevo peleando muchos años. A mi manera de entender la forma de jugar en Segunda es más sencilla que en la Segunda B donde hay muchos campos de césped artificial y has de variar tu forma de jugar».

Espera un Rayo Majadahonda parecido al de Cartagena «apretarán siempre, no van a modificar su modelo. Querrán mantener la posesión del balón y jugar muy atrás para poder jugarnos en la espalda».

La plantilla salió ayer tarde rumbo a Pozuelo, donde se hospedó anoche y esta noche, en las horas previas al partido en Majadahonda.