Artes Escénicas

De la ESAD a los Max por la ‘Nacional 340’

La joven compañía murciana Physical Collage hace historia colándose entre las nominadas para la vigésimo séptima edición de los premios más importantes de las Artes Escénicas nacionales

El proyecto, capitaneado por Elena Mateo, Estela Ferrándiz, Claudia Maró y Carmen Liza, opta a Mejor Espectáculo Revelación y Mejor Autoría Revelación gracias a una obra de teatro físico sobre la memoria histórica y ‘La desbandá’

Elena Mateo durante una representación de ‘Nacional 340’.

Elena Mateo durante una representación de ‘Nacional 340’. / Pepe H.

Asier Ganuza

Asier Ganuza

Cuenta Elena Mateo que están todas «un poco en shock». «Como que no nos lo terminamos de creer», insiste. «Es que ni nos imaginábamos poder estar ahí. Quieras que no, todavía no somos muy conocidas en Madrid..., ¡ni siquiera hemos podido estrenar aquí! Llevamos un año intentándolo y aún no lo hemos conseguido», reconoce desde la capital la actriz y dramaturga murciana. Habla de Nacional 340, su primera obra «profesional», y de la nominación a dos Premios Max, los más importantes de las Artes Escénicas a nivel nacional. Cuando atiende a La Opinión, prácticamente se acababa de enterar de que el 1 de julio estará en la gran gala que la Fundación SGAE celebrará en el Auditorio Adán Martín de Tenerife; cita a la que acudirá «mucha gente que es referente» para ella y sus compañeras, o, lo que es lo mismo, para la compañía Physcal Collage.

En concreto, Nacional 340 –que gira en torno a un episodio «olvidado» de la Guerra Civil como es el de ‘La desbandá’– opta a Mejor Espectáculo y Autoría Revelación. Ella, además de actuar, es quien firma el texto. «Me ilusiona especialmente porque, como muchos otros creadores jóvenes, me dedico a echar convocatorias que nunca salen. Así que, sí, en ese sentido, esto ha sido algo bastante inesperado... Sobre todo porque..., no sé, siento que es más fácil que se reconozca una ópera prima en el mundo del cine que en el teatro, donde parece que tienes que haber escrito mucho para que te consideren ‘profesional’», reflexiona Mateo. En cualquier caso, hace dos puntualizaciones importantes: la primera es que, dada la propia naturaleza de la obra –«que mezcla muchos estilos y lenguajes y apuesta más por lo físico que por el texto»–, pensaba que era prácticamente imposible que el jurado de la SGAE pudiera fijarse en ella como autora, y la segunda, y más importante, es que en absoluto se siente enteramente responsable de este escrito.

Los cinco miembros del elenco de 'Nacional 340' durante un momento de la obra.

Los cinco miembros del elenco de 'Nacional 340' durante un momento de la obra. / Pepe H.

«Por supuesto que en lo personal estoy muy contenta, pero sé que sin el equipo de Physical Collage no lo hubiera conseguido. Vale que hay un proceso solitario de escritura, pero también había que presentar luego esas palabras a los actores para que les pusieran cuerpo, y en base a ese trabajo de escena es cómo hemos podido ir puliendo, añadiendo y, sobre todo, quitando», explica. Y esto es importante, porque, en realidad, «el texto dramático no son tantas páginas», ya que hablamos de una pieza de lo que se conoce como ‘teatro físico’. ¿Y esto qué quiere decir? «Pues básicamente que nosotras le damos mucha importancia a la plástica, a la composición coreográfica. Entendemos que hay cosas que es más interesante contarlas a través del cuerpo que con palabras. Y usamos el texto cuando pensamos que es lo más adecuado, ¿eh?, pero nos atrae mucho ese poder contar a través del gesto», explica la joven dramaturga.

Y una vez más cabe resaltar su uso del plural, porque Physical Collage es «sinónimo de Estela Ferrándiz, Claudia Maró, Carmen Liza y Elena Mateo, cuatro compañeras de la Escuela de Arte Dramático de Murcia». Fue allí donde, durante su último curso de estudios, comenzaron a gestar la obra por la que ayer se las reconoció como una de las compañías jóvenes más a tener en cuenta del panorama escénico nacional: «Fue nuestro taller de Cuarto de carrera. Debíamos elegir un concepto y trabajar sobre él. El nuestro era lo ‘monstruoso’, y yo recordé este episodio que me era familiar porque mi padre es de Almería». Mateo se refiere a ‘La desbandá’, que es como se conoce popularmente a la huida de más de 300.000 civiles y milicianos tras la victoria del bando sublevado en la batalla de Málaga, en febrero del ‘37. Tomaron a pie la carretera que une la capital de la Costa del Sol con la vecina Almería –hoy conocida como N-340– y fueron bombardeados por las fuerzas golpistas desde el mar y desde el aire. Se calcula que murieron entre 3.000 y 5.000 personas.

Un episodio "olvidado o, incluso, silenciado"

«Yo conocía esta historia, pero muy por encima. Todavía veraneo en Almería y todos los años hay gente que hace una marcha en recuerdo de las víctimas, pero sigue siendo un episodio olvidado o, incluso, silenciado. De hecho, la mayoría de mis compañeros ni siquiera habían oído hablar de él», recuerda. «Tampoco Carmen», añade. Se refiere a Carmen Liza, que fue quien aportó la otra gran clave de aquella obra primigenia: «Ella quería trabajar sobre la infancia robada en la guerra, y en base a eso empezamos a hacernos preguntas y pensar también en cómo los jóvenes nos enfrentamos a la memoria histórica y cuál es nuestro papel en el momento actual», apunta Mateo, que remarca la coincidencia del estreno en 2022 de A7: Memoria y asfalto –la versión reducida y «de escuela» de Nacional 340– con el inicio de la invasión rusa de Ucrania.

Después de aquello, las cuatro intérpretes y creadoras sobre las que se asentaría la futura compañía –Physical Collage hizo su primera gran aparición en 2021 con Herejes, con la que fueron finalistas del CreaMurcia– se reunieron para darle una forma definitiva a este proyecto, para lo que incorporaron a un puñado de compañeros, también de la ESAD: «Ampliamos con Ángel Sola –el quinto miembro del reparto– y Carlos Esteve, que lleva el espacio sonoro junto a Claudia. Y Fran García se ha encargado de la iluminación», apunta Mateo, que remarca a su vez el papel de Sforza Producciones como productora asociada. La joven creadora también habla de la residencia que hicieron en el Párraga entre finales de enero y principios de diciembre del pasado año –y que concluyó con una «muestra interna»– y del estreno definitivo de Nacional 340, en el Auditorio Villa de Salobreña, en Granada.

'Nacional 340' incluye múltiples lenguajes.

'Nacional 340' incluye múltiples lenguajes. / Pepe H.

Esta versión –la que les ha valido dos nominaciones a los Max– aprovecha una triste coincidencia: «El inicio de aquella huida, de ‘La desbandá’, coincidía con el comienzo del Carnaval, así que aprovechamos para plantear un presente en el que unos jóvenes disfrutan de estos festejos mientras que dos de ellos, dos hermanos, muy vinculados familiarmente a este episodio, se preguntan sobre qué queda en ellos de aquel suceso». Se trata de la excusa perfecta para hablar de lo que ellas llaman «olvido heredado» y de cómo nos afecta, de cómo nuestra historia y nuestro entorno influyen en nuestra percepción de la memoria y de los diferentes puntos de vista desde los que se puede abordar un tema –el de la memoria histórica– que Mateo entiende que es «difícil» de tratar por la «situación política» actual. Pero para eso están las Artes Escénicas, ¿no? «Creo que el teatro siempre ha sido un espacio muy dado a la empatía, a escuchar lo que te cuenta el otro, y a la reflexión. Y un lugar de encuentro –igual que la danza y el circo– en el darnos cuenta de que juntos somos más grandes que la propia individualidad», asegura.

De hecho, Elena Mateo admite que, si bien no esperaban un reconocimiento al nivel de los Max, sí pensaban que Nacional 340 podría tener cierto recorrido en salas. «Mucha gente nos dice que, incluso días después de venir a la representación, siguen dándole vueltas a una frase o a una imagen, y eso es genial. Por eso queremos que vean esta obra cuantas más personas mejor», señala su autora, que reconoce que el mejor premio que pueden recibir es tener la oportunidad de cerrar nuevos bolos para presentarla en cualquier escenario que las quiera recibir. «Es lo que queremos: seguir trabajando, como decía Candela Peña. Tenemos muchas ganas de que la obra ruede y de poder seguir desarrollando proyectos como este», apunta.

Entretanto, las cuatro patas de Physical Collage siguen formándose y trabajando por y a raíz de Nacional 340. Tienen un proyecto titulado Archivos de una huida cuyo primer capítulo presentaron en la Cárcel Vieja el pasado verano y, el segundo, en Córdoba, en abril; piezas para espacios poco convencionales y también relacionados con la memoria histórica. Y en eso están. Porque Mateo, personalmente, no quiere pensar mucho en sus opciones de cara a los Max: «Obviamente, lo hemos pensado [la posibilidad de ganar al menos uno de los dos premios], y prepararemos los discursos por si acaso, porque tenemos muchas ganas de decir cosas, y más si nos dan la oportunidad de hacerlo ante una audiencia como la que se va a congregar en Tenerife. Pero, si te soy sincera, lo vivo con un poco de presión. Quizá es por mi forma de ser, pero prefiero no darle demasiadas vueltas», confiesa Mateo, que, en cualquier caso, ya ha logrado lo que quería: llamar la atención sobre su compañía y sacar la historia de ‘La desbandá’ a la palestra