Exposición

La fructífera amistad entre Ramón Gaya y el chef Raimundo González

El museo del pintor inaugura una muestra con obra inédita que el artista regaló al Rincón de Pepe

Dos mujeres observan una de las obras. | JUAN CARLOS CAVAL

Dos mujeres observan una de las obras. | JUAN CARLOS CAVAL / a.g.r.

Asier Ganuza

Asier Ganuza

El Museo Ramón Gaya de Murcia acoge desde este jueves una muestra «muy especial» con obras, algunas de ellas inéditas, del reconocido artista murciano; trabajos que fueron regalados personalmente por el pintor a Raimundo González, fundador y jefe de cocina del mítico Rincón de Pepe.

La exposición, que fue inaugurada por el alcalde de Murcia, José Ballesta, junto al concejal de Cultura e Identidad, Diego Avilés, lleva por título Ramón Gaya en la colección de Raimundo González Frutos, y se podrá visitar hasta el mes de marzo de 2024 en el céntrico museo de la plaza de Santa Catalina. A la presentación asistió, a sus 98 años, el propio Raimundo González.

Se trata de la primera vez que el Gaya reúne estas pinturas, un total de veintidós obras «de una calidad indiscutible», nueve de ellas inéditas. A ellas se suma también una pieza que artista hizo ex profeso en el año 1977 para el restaurante, una cubierta ovalada de un tonel donde pintó una de sus características composiciones.

La historia que unió a Raimundo González y Ramón Gaya es la historia de una sólida amistad, «donde hubo respeto y admiración mutua», explican los responsables de la muestra. Para entenderlo, hay que recordar que el Rincón de Pepe, que en sus inicios fue una taberna de vino, no solo se convirtió con el tiempo en un reseñado restaurante –llegó a contar, incluso, con una Estrella Michelin–, sino que también se convirtió en alojamiento.

Allí, González y su mujer, Encarna Molina, dieron de comer a grandes personalidades nacionales e internacionales, como a Orson Welles, «que siempre pedía paletilla de cordero lechal asado a la murciana. Se comía dos y de postre decía que le pusiese otra», tal y como recuerda el fundador del Rincón de Pepe. Y entre estos clientes destacados se encontraba también Ramón Gaya, quien siempre que volvía a Murcia se alojaba en su hotel.

De hecho, el Rincón de Pepe tenía una habitación reservada para él: la número 12. Una estancia en la que nunca faltaban flores frescas, señala González. «Todo el personal del Rincón de Pepe trataba a Gaya y a su mujer, Isabel Verdejo, de manera exquisita. Incluso en la carta del restaurante había un plato denominado ‘Peras Ramón Gaya’, confeccionado por el propio Raimundo. De ahí que el artista respondiera a tanta generosidad regalando algunas de sus obras a Raimundo González», explican desde el museo.

Y de esos obsequios y de la colección privada que ha confeccionado el fundador del Rincón de Pepe nace esta muestra, con la que la pinacoteca sigue profundizando en la figura de Gaya, registrando y exhibiendo obra ‘nueva’ del genial pintor murciano.

En cuanto a Raimundo González, su papel es clave para entender el buen nivel de la gastronía murciana. De joven recorrió la Región buscando por cada pueblo y aldea a «esa mujer de cada sitio que lo mismo atiende a un parto que te hace una tarta o un guiso, desde gallina en pepitoria a perdices con habichuelas. Luego yo adaptaba esa receta y la hacía a mi gusto», recuerda el laureado chef, que añade: «Mi mujer, cuando al acostarme me quedaba mirando al infinito, decía: ‘Mañana plato nuevo’».