Entrevista

Tanxugueiras: "Hemos superado la vergüenza de mostrar la música tradicional ante el gran público"

Las gallegas encabezan la tercera edición del FolkFest Región de Murcia, que arranca este viernes en el Auditorio Víctor Villegas de la capital del Segura.

Tanxugueiras.

Tanxugueiras. / L. O.

Tras su paso por el Benidorm Fest, Tanxugueiras han conseguido que su música llegue a espacios en los que nunca antes había estado, y eso ha sido el detonante para que el grupo aparezca cada vez más en carteles de festivales de todo signo, llegando a congregar a 80.000 personas durante su concierto en la coruñesa playa de Riazor. El trío formado por Aida Tarrío y las hermanas Olaia y Sabela Maneiro nació para cantar en foliadas y seráns, y se ha convertido en todo un fenómeno que recoge el legado de las pandereteiras de su tierra, pero añadiéndole sonidos actuales. Deudoras de las mujeres que perpetuaron la tradición oral del canto popular de las aldeas, Tanxugueiras ya se dan por satisfechas con lo mucho que han conseguido en el último año para la música gallega, pero incluso han encontrado tiempo para publicar su tercer álbum, Diluvio (2022), que presentarán mañana en el FolkFest Región de Murcia.

Acaba de ver la luz La humanidad y la tierra, una colaboración en español con Iván Ferreiro. En 2022 también colaboraron en Cambia todo, de Muerdo, y unieron fuerzas con Rayden. ¿La identidad de las lenguas ha encontrado un altavoz en Tanxugueiras?

Las lenguas son parte de nuestra cultura y de nuestra riqueza, y nosotras las utilizamos indistintamente para expresarnos en nuestras canciones. Es verdad que hacemos música tradicional gallega y que, por eso, la que más utilizamos es el gallego, pero estamos abiertas a cualquier tipo de colaboración. Cantamos también en euskera con Xabi Aburruzaga y en catalán con Roba Estesa y en el disco de la Marató de este año; y en Terra utilizamos diferentes lenguas para el «non hai fronteiras»... Por lo que sí, podríamos decir que las lenguas siempre tienen su hueco en nuestras canciones, y nos gusta ser un altavoz para su difusión.

¿Os sorprendió lo bien que fue acogida Terra? Fue número uno en ventas físicas, os supuso el premio MIN a Mejor Artista Independiente..., y todo ello, con el gallego por bandera.

Siempre es una sorpresa que una canción en lengua gallega y de corte tradicional llegue a esos números, pero estábamos muy convencidas de la propuesta que llevábamos. Hace ya varios años que nos marcamos un camino, que era dar a conocer nuestra lengua y cultura más allá de nuestra tierra, y parece que lo estamos consiguiendo. Es muy bonito poder vivir este momento y ver los hitos que alcanzamos tanto con Terra como con el resto del disco, Diluvio.

Diluvio es una mezcla de música tradicional con ritmos urbanos. ¿Qué habéis descubierto como cantareiras con esa fusión? ¿Ese interés por la mezcla es uno de vuestros principales valores?

Descubrimos que para nosotras es una fusión natural. Porque nosotras somos chicas jóvenes que escuchan música urbana, pero que, al mismo tiempo, llevamos toda la vida nutriéndonos de la música tradicional. En ese sentido, creo que nuestro principal valor es continuar la tradición, pero adaptándola a nuestros gustos, a nuestra época, y siempre desde el respeto máximo a la cultura y a la importancia que tiene su conservación.

¿Cómo ha evolucionado vuestra música desde el primer álbum epónimo –de 2018– hasta Diluvio? ¿Cómo ha sido el proceso de creación del álbum?

Diluvio es el culmen de una transformación que iniciamos con nuestro primer disco, mucho más tradicional, y que acentuamos con Contrapunto (2019), el segundo, que es un paso intermedio entre el tradicional puro y esta nueva sonoridad, fruto de escuchar a diferentes artistas y beber de distintos estilos. Al final, se trata simplemente de acercar la música tradicional, en gallego, a las nuevas generaciones.

También habéis colaborado con Rozalén en el disco Matriz (2022), que redunda en esta idea. ¿Estamos ante el resurgir de la música tradicional?

La música tradicional siempre ha estado ahí. Lo que pasa es que ahora hay una nueva generación de artistas que la está poniendo de nuevo en el foco de la gente. Está Rozalén con Matriz, pero también Rodrigo Cuevas, Baiuca, Karmento... La gente vuelve a disfrutar con la música tradicional, y lo que se traspasó fue la barrera que nos autoimponíamos, que hacía que no la mostráramos al gran público. Esa ‘vergüenza’ se superó y ahora esta música suena en discotecas, radios comerciales, ocupamos slots en festivales indies... Se normalizó su escucha y disfrute, por eso es tan importante que artistas como Rozalén lancen estos discos.

En Eurovisión, la presencia del inglés es cada vez mayor. ¿Estamos abocados a la homogeneidad lingüística?

No tiene por qué ser así. Sí se está promoviendo una homogeneidad, pero también hay cada vez más artistas que cantan en su idioma. Las lenguas propias son una de nuestras grandes riquezas, y no deben perderse, por eso es importante darles visibilidad. 

 ¿Qué os motivó a presentaros al concurso cantando en galego?

El respaldo que tuvimos de los eurofans con nuestra canción Figa. Llegadas a ese punto, pensamos: «¿Por qué no?». Eso sí, decidimos presentarnos como Tanxugueiras, con todo lo que eso significa: tradición, gallego, sororidad, feminismo... La motivación era mucho mayor: poder enseñar nuestras tradiciones y nuestra lengua es algo a lo que no estamos dispuestas a renunciar.

El paso por el Benidorm Fest es innegable que fue productivo. ¿Cómo ha sido volver a allí un año después? ¿Qué balance hacéis tras este año de vértigo?

Aquello fue como montarse en una catapulta que te lleva hasta el gran público. Antes, nuestra carrera ya era fructífera tanto en Galicia como en el extranjero, pero nos costaba mucho aparecer en el resto de España. Con nuestra participación se abrieron oportunidades que nunca habíamos pensado que tendríamos. Pasamos a formar parte de carteles de festivales a los que acudíamos como público, a llenar recintos, a hacer una gira de casi ochenta conciertos (además de galas, cientos de entrevistas, grabaciones...) desde finales de marzo a octubre... Y regresar a Benidorm fue muy bonito: reencontrarse con ese ambiente, con nuestro público, volver a cantar Terra con los fans... ¡Un gran broche de oro para todo este año!

Aida aprendió a tocar la pandereta gracias a la abuela María. ¿Está ella al tanto de vuestras correrías?

¡Claro que sí! María formó parte de nuestros primeros viajes, y aún ahora nos acompaña siempre que puede.

¿Es cierto que la promoción del álbum llegó hasta Times Square, en Nueva York?

Llegó a Times Square, sí. Fue todo un sueño vernos allí. Este año Aida estuvo de vacaciones por Nueva York y... verse en esa plaza, pensar que salimos en esas pantallas... ¡nos pone la piel de gallina!

Fecha: Mañana, 20.30 horas

Lugar: Auditorio Víctor Villegas, Murcia.

Precio: 30 euros.

¿Os costó recuperaros del Benidorm Fest? ¿Qué fue lo mejor de haber pasado por allí?

Aún nos estamos recuperando. Desde que decidimos participar, todo fue muy rápido; sin tiempo a parar y pensar. Solo nos permitimos aprovechar la inercia y seguir hacia delante. Sin duda, lo mejor fue poder mostrar nuestra música y cultura y que tuviera la acogida tan impresionante que tuvo, lo que nos permitió poder tener uno de los mejores años de nuestras vidas.

¿Cómo os definís las Tanxugueiras? ¿Cuál es vuestra esencia? ¿Seguís siendo cantareiras y pandereteiras? ¿Qué buscáis transmitir con vuestra música?

Siempre seremos cantareiras y pandereteiras. Esa es nuestra esencia y la base de la existencia de Tanxugueiras. Sin eso, nada de esto no tendría sentido. Con nuestra música queremos transmitir nuestra cultura, nuestra lengua, nuestras tradiciones..., pero también un mensaje sobre nuestros valores. En Diluvio, por ejemplo, hablamos sobre lo que se entiende por ‘pecados capitales’, poniendo en duda que realmente sean pecados y dando nuestra visión sobre ellos, añadiendo también alguno que no se entiende como capital, pero que para nosotras sí lo es.

¿Y qué mensaje pretendéis lanzar Tanxugueiras con Pano Corado?

Un mensaje de libertad, de amor libre. Últimamente parece que estamos dando pasos atrás con las libertades que se consiguieron hace años, y no debe ser así. Cada persona es libre de amar a quien considere, incluso a sí mismo, y eso no debe ser puesto en duda por nadie.

Congregasteis a 80.000 personas para vuestro concierto en la playa de Riazor. Debió de ser un momento extraordinario. ¿Cómo lo vivisteis?

Fue algo impresionante, un concierto inolvidable que, al igual que el de Castrelos, en Vigo, con 40.000, se nos quedará guardado para siempre en la memoria. Y lo más bonito de esos bolos fue que la gente estaba conectadísima con nosotras, lo que hace que sean momentos doblemente especiales.

Tanxugueiras tocareis en el Viña Rock. ¿Os resulta fácil adaptaros a todo tipo de festivales y público? ¿Habéis sufrido las críticas de los puristas? ¿Cómo reaccionáis? ¿Cómo lleváis los pros y los contras de la fama?

Somos muy punkies, por lo que no tenemos problemas. ¡Solemos ser asiduas de festivales cuando no tenemos que tocar! Sin duda es un reto, pero nos encanta poder subir a cualquier escenario y mostrarnos tal y como somos, enseñar nuestra música... No solo no nos cuesta nada, sino que realmente nos motiva. La gente nos acoge muy bien y gusta lo que hacemos, así que, ¿qué más pedir?

¿Por qué elegisteis el nombre de Tanxugueiras?

Por no discutir poniendo de dónde éramos cada una de nosotras [Risas]. Aida es de Ribeira, y Olaia y Sabela somos de Teo, por lo que buscábamos algo intermedio. Es muy común poner nombres de topónimos, y un amigo nos pasó un listado en el que estaba ‘tanxugueiras’, que es un conjunto de fincas de la zona de Fumaces, en el Ayuntamiento de Riós, en Ourense, y nos gustó y así quedó.

FolkFest: tres días de conciertos en el Víctor Villegas

La tercera edición del FolkFest, evento destinado a promocionar la música popular entre el público de la Región, se celebra este fin de semana, de viernes a domingo, en el Auditorio Regional Víctor Villegas de Murcia. La primera jornada estará protagonizada por los conciertos de Tanxugueiras y Azarbe, un grupo de la tierra con más de dos décadas de trayectoria e inspirado en las cuadrillas del sureste español. Además, se inaugurará en el vestíbulo una exposición fotográfica dedicada al Tío Juan Rita que podrá verse hasta la clausura del festival.

Para el sábado se ha programado un taller de percusión tradicional con pandereta, la proyección del documental Al otro lado del mar y una mesa redonda que llevará por título ‘Folk vs. World Music’. Completará la jornada una segunda sesión de conciertos a cargo de El Mantel de Noa, Timples y otras Pequeñas Quitarras del Mundo y Nuevo Mester de Juglaría, mientras que el domingo presentarán sus últimos trabajos Maestro Espada y de Juan José Robles. Además, habrá un taller de cajón, un pasacalles y una sesión familiar con Pep López.