Bizcocho delicioso con una textura adorable, elaborada sin nada de levadura y únicamente con claras de huevo y nata, de ahí su precioso color blanco, con esa deliciosa e irresistible corteza crujiente de canela y azúcar. El que lo prueba se enamora al instante. ¡Asegurado!
INGREDIENTES
9 claras de huevo, 360 g de azúcar, 375 ml de nata para montar, 375 g de harina de trigo, 40 ml de anís, azúcar y canela para espolvorear la superficie del bizcocho.
ELABORACIÓN
1. Montamos las claras de huevo a punto de nieve fuerte, utilizando una batidora de varillas eléctrica a máxima velocidad.
2. Añadimos poco a poco el azúcar y batimos un minuto más a máxima velocidad.
3. Bajamos la velocidad y agregamos el anís, batiendo hasta que se integre.
4. Tamizamos la harina sobre la mezcla de claras de huevo y mezclamos suavemente con una lengua pastelera mediante movimientos envolventes.
5. Montamos la nata ( que deberá estar muy fría ) y una vez montada, la añadimos al bol, mezclando una vez más con la lengua pastelera, suavemente hasta conseguir una masa suave con todos los ingredientes bien integrados.
6. Vertemos la masa obtenida sobre un molde rectangular o bandeja de horno con paredes altas, engrasado y forrado con papel vegetal.
7. Espolvoreamos la superficie con abundante canela y azúcar.
8. Metemos al horno precalentado a 180 grados y horneamos a esta temperatura durante 40 - 45 minutos, hasta que la superficie se vea doradita. Retiramos del horno, dejamos que se enfríe y servimos cortado en cuadraditos.
