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Inteligencia artificial y robótica para reducir el uso de fertilizantes y fitosanitarios

La Región esta desarrollando aplicaciones que ayudan al sector mejorando la efectividad y la reduciendo hasta el 20 por ciento los costes de producción de las explotaciones agrícolas

Uno de los técnicos instalando los difusores en los cultivos de arroz en Calasparra

Uno de los técnicos instalando los difusores en los cultivos de arroz en Calasparra / L.O.

Redacción

Reducir el uso de fertilizantes y fitosanitarios en explotaciones agrícolas es el objetivo del proyecto PestNu que comenzó en 2021 y que ahora presenta los resultados. En él han colaborado una veintena de empresas y administraciones de nueve países europeos entre las que se encuentra el Centro de Demostración Agraria ‘El Mirador’ y Tilamur.

Ambos han desarrollado tecnologías en las que gracias a la robótica y la Inteligencia Artificial (IA) se consigue ser más selectivo a la hora de aplicar tratamientos. Son «tecnologías con las que se está ayudando al sector porque se reduce el impacto ambiental de la actividad y también los costes en fertilizantes y fitosanitarios hasta un 20 por ciento», destacó la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira, durante una visita realizada hoy a las instalaciones de Tilamur en Lorquí.

En ella, pudo comprobar el funcionamiento de los analizadores para el monitoreo de nutrientes en sistemas de acuicultura y acuaponía cuyos componentes se pueden fabricar con una impresora 3D. «En el mercado ya existen analizadores pero tienen un coste elevado. Lo que se ha desarrollado es un producto portátil y que tienen un coste mucho menor lo puede ayudar a la rentabilidad de pequeñas explotaciones», señaló Sara Rubira.

Además, en el marco de este proyecto, también se han desarrollado dos aplicaciones robóticas que pueden ayudas al control de plagas. Una de ellas es una trampa robótica con inteligencia artificial para monitorizar en tiempo real si una plaga está afectando a una plantación. La otra es un robot que es capaz de detectar plagas y enfermedades en cultivos, que además puede fumigar las zonas afectadas.

Protección del arroz

La consejera recordó que este proyecto ha contado con un presupuesto de 7,5 millones de euros de los que 6 millones corresponden a fondos de la Unión Europea.

En esta línea, la Comunidad también trabaja de manera conjunta con la DOP Arroz de Calasparra para luchar contra la plaga de Chilo supreslis’, minimizando el uso de fitosanitarios.

«En 2019 comenzamos a usar difusores que contienen la feromona de la hembra de esta mariposa. Con ello conseguimos confundir a los machos que no localizan a las hembras y se reduce el número de cultivos afectados por esta plaga», indicó Rubira.

La organización profesional agraria ASAJA Murcia ha solicitado al Ministerio de Agricultura y la Unión Europa «la creación de ayudas directas a los productores de limón de Europa, como consecuencia de los efectos de la Guerra de Ucrania». «El conflicto bélico ha provocado inestabilidad en los mercados del Este de Europa, lo que ha supuesto un descenso en el consumo y dificultades de acceso de productos agrícolas a los países de dicho entorno. Otros sectores agrícolas han tenido disponibles ayudas como consecuencia de la sequía y de la guerra de Rusia-Ucrania», resaltas fuentes de esta entidad».

ASAJA reclama ayudas de Europa para el sector del limón

Además, desde ASAJA se insiste en que es fundamental la mejora del valor añadido de la transformación de limones. «Es necesario el apoyo e incentivo para que la industria obtenga productos derivados del limón, zumo, aceites esenciales y demás subproductos con alto valor añadido. También hacen falta programas específicos de investigación e innovación para aumentar las cantidades de limones transformados por la industria; el establecimiento de acuerdos entre organizaciones agrarias y asociaciones de industrias transformadoras de limones sobre precios medios de referencia de limones para industria en cada campaña; o la modificaciones normativas a corto plazo para establecer incentivos fiscales para el uso del zumo de limón como acidulante en conservas vegetales, entre otras medidas», apunta la organización.

El barrenador del arroz ‘Chilo supreslis’ es una de las principales plagas a las que se enfrentan los cultivos del coto arrocero de Calasparra. Se trata de una larva que penetra dentro de la caña de la espiga alimentándose hasta completar su ciclo biológico. La Comunidad trabaja de manera conjunta con la DOP Arroz de Calasparra para luchar contra esta plaga minimizando el uso de fitosanitarios.

«En 2019 comenzamos a usar difusores que contienen la feromona de la hembra de esta mariposa. Con ello conseguimos confundir a los machos que no localizan a las hembras y se reduce el número de cultivos afectados por esta plaga», indicó la consejera de Agua, Agricultura, Ganadería y Pesca, Sara Rubira.

Este sistema debe estar instalado un mes después de la siembra del arroz y se realiza bajo la supervisión del personal técnico del Consejo Regulador y del servicio de Sanidad Vegetal. Se instalan seis varillas por hectárea en las que se insertan seis unidades de la feromona en cada una, que se distribuyen homogéneamente alrededor de las parcelas de cultivo aprovechando los márgenes y los caminos que los delimitan.

«El Gobierno regional proporciona el material necesario para su implantación, tanto los difusores como las varillas donde van implantadas, así como las trampas con las feromonas de seguimiento para verificar que no hay capturas y por lo tanto el sistema funciona. Mientras que el Consejo Regulador colabora con la colocación de los difusores y con la red de seguimiento, y con controles adicionales sobre el cultivo para verificar que no hay daños», explicó la consejera.

Para que este sistema sea más efectivo, en la campaña 2024 estos difusores de feromonas se han instalado en el cien por cien de las parcelas sembradas, unas 500 hectáreas aproximadamente. Para ello, se han adquirido unos 18.000 difusores, con un coste de adquisición de unos 15.000 euros de fondos propios de la Comunidad Autónoma.

«Una vez más el Gobierno regional y el Consejo Regulador apuestan por una calidad diferenciada del mejor arroz del mundo, que se produce con un sistema de riego con aguas vivas en continua circulación, y con el mínimo empleo de productos fitosanitarios que favorece la biodiversidad de la fauna en torno al río Segura. Algo que nos diferencias frente a las producciones de arroz de terceros países que se siguen importando a la Unión Europea», concluyó Sara Rubira.