Entrevista | José Catalá Presidente de la Federación Empresarios Turísticos (Em Tur)

José Catalá: "Tratamos de pensar como piensa un turista que no diferencia si está en San Pedro o en Cartagena"

Cree que el cambio en la percepción del turismo de las comunidades desbordadas por la aglomeración es una oportunidad para mostrar playas sin masificación y ofrecer paquetes que combinan el alojamiento con deportes náuticos, festivales o la gastronomía

José Catalá.

José Catalá. / Juan Carlos Caval

María José Gil

María José Gil

José Catalá, presidente de Hostetur, lidera la nueva Federación Turística de la Costa Cálida Em Tur, constituida por la asociación que agrupa a los hoteles y por las empresas del sector náutico. Nacido en Alcoy, llegó a la Región hace 30 años, para dirigir el hotel Amistad de Murcia y en la actualidad dirige el Thalasia de San Pedro del Pinatar.

Qué aspiran a conseguir?

Em Tur nace con la ambición y el ADN de ser una de las voces más influyentes y más decisivas en materia turística en la Región. En el pasado ha habido demasiado personalismo e intereses particulares. Yo llevo 30 años en el asociacionismo empresarial y lo he conocido de primera mano. Nosotros llegamos con una voluntad totalmente distinta, lo que queremos es construir destino. Partimos de la constatación de una realidad: que un mercado turístico tiene unas diferencias muy grandes con respecto a otros mercados económicos. Un mercado turístico que se asienta en un destino turístico hay que construirlo, no te viene dado. Se puede certificar que no hay en España ningún destino turístico de éxito que no tenga detrás una fórmula de gobernanza turítica puesta en marcha. Eso significa que haya una articulación institucional en un órgano de cogobernanza y codecisión.

¿Qué tipo de órgano sería?

Podría ser un patronato de turismo de la Costa Cálida. Tenemos el convencimiento absoluto de que esta fórmula permite que las decisiones sean más eficientes, porque se toman en un entorno en el que el sector privado, la industria turística, tiene una voz reconocida y un ámbito decisorio importante. No pretendo decir que la Administración no sea eficiente en su toma de decisiones, lo que quiero decir es que en entornos tan complejos la eficiencia es que no haya una visión unilateral, sino que sea global. Nos movemos en un entorno muy complejo, con problemas del Mar Menor, de coordinación interadministrativa entre los entes locales. Tiene que haber unas instituciones que atiendan esa complejidad.

«En los últimos 20 o 30 años no hemos sido capaces de articular una voz única del turismo»

Entre los socios de Em Tur no está la hostelería.

Es que no queremos. Me gustaría explicarlo porque parece que genera cierta fricción. Uno de los principales problemas que hemos tenido en los últimos 25 o 30 años es que no hemos sido capaces de articular una voz clara y diáfana del turismo. La voz del turismo siempre ha estado solapada dentro de otras organizaciones que incluían muchas más cosas. A la hora de defender los intereses del turismo, creo que la voz tiene que tener protagonismo y no estar mezclada con otros intereses. No tienen nada que ver los intereses turísticos con los de un sector como el de colectividades (catering) que está dentro de la federación de hostelería. Institucionalmente, tanto Hostetur como ahora Em Tur estamos bajo el liderazago de COEC y, por tanto, bajo el liderazgo de la CROEM. Tratamos de pensar como piensa un turista. Alguien que viene a la Costa Cálida no es capaz de diferenciar si está en San Pedro del Pinatar, en Cartagena o en Los Nietos.

Los precios de la Costa Cálida siguen siendo los más bajos.

La historia reciente de los últimos 20 años es una historia bastante accidentada. En materia turística hemos dado muchísimos bandazos. Ahora estamos trabajando de una forma muy seria, muy coherente, con un Plan Estrategico que fue consensuado, pero hay un guión, un criterio. El ITREM está haciendo uno de los mejores trabajos que se han hecho en la historia, porque hay criterios, hay una dirección. Llevo 30 año en la Región y nunca en el pasado ha existido la apertura y la predisposición al diálogo que hay ahora. El ITREM ha entendido que no puede ir la Administración por un lado y nosotros por otro. La historia ha sido muy tortuosa. Hemos tenido un consejero de Turismo que decidió unilateralmente que el turismo era una performance, porque él venía del mundo de las performances artísticas, con la campaña protagonizada por Karabatic. La Región está geográficamente entre dos monstruos, la Comunidad Valenciana y Andalucía. Tenemos que ver cómo lo han logrado. El Patronato de Turismo de la Costa del Sol se estudia en las escuelas de negocios como ejemplo de éxito.

«El ITREM ha entendido que no puede ir la Administración por un lado y nosotros por otro»

¿El aeropuerto es otro problema?

No lo calificaría como un problema. Es una asignatura pendiente que hay que aprobar con nota. Es una realidad que está ahí. Soy miembro de una mesa en la que se está trabajando muy activamente y creo que se está haciendo un trabajo en profundidad para decidir el espacio y el concepto que tiene que tener nuestro aeropuerto. Tener El Altet a un tiro de piedra no nos favorece, pero acabará encontrando su lugar. En la Región de Murcia, si hacemos las cosas bien, tenemos una oportunidad histórica. Por primera vez en la temporada alta del año pasado se ha empezado a percibir una discurso sobre y la sostenibilidad y el volumen del turismo. Esa puede ser nuestra oportunidad.

¿A qué se refiere?

Cuando todo en otras comunidades no hay posibilidades deponer una sombrilla ni en cuarta fila, la Región puede mostrar playas salvajes y de todo tipo que no están masificadas. Podemos ofrecer un turismo de sol y playa en el que es posible contratar un paquete que incluye el hotel y una experiencia de buceo, de kayak, de senderismo o gastronómica. Se puede contratar una comida para un grupo y degustar un caldero durante un paseo en un barco. También es posible que nos afecte el cambio climático en temporada alta, pero también nos puede beneficiar en temporada baja. En el Thalasia tenemos muchos equipos de fútbol islandeses que vienen en invierno. Creo que podemos ofrecer una cara alternativa a los mercados.

¿Los pisos turísticos pueden ser una amenaza?

No tenemos una presión tan grande como la de otras comunidades, pero tenemos mucha presión. De la mano de las universidades, estamos trabajando en un sistema de control de inteligencia turística de control de datos que va mucho más allá de las estadísticas oficiales en las que nos hemos basado tradicionalmente, que son las que los alojamientos facilitan al INE. Eso da unas cifras de las personas alojadas en los hoteles, pero cuando acudes a otras fuentes de datos, que es lo que llamamos Inteligencia Turística, te llevas una gran sorpresa. El número de visitantes que recibe la Región posiblemente sea no el doble ni el triple, sino bastante más.

La Región se está planteando estos cambios o va muy relajada?

Hemos estado relajados durante mucho tiempo y no me refiero solo a la Administración. Nosotros estamos haciendo un ejercicio en el terreno del asociacionismo turístico empresarial que podríamos calificar como una pequeña revolución. Estamos dando forma a un concepto de asociacionismo empresarial que no es que el que prevalecía en la Región durante mucho tiempo. No tiene nada que ver. Hemos creado una organización nueva, Empresarios Turísticos de la Costa Cálida (Em Tur). Es una nueva federación que aglutina a los principales actores en lo que calificamos como ‘turismo azul’ y que es un proyecto innovador recogido en el Plan Estratégico de Turismo 2022-2032. Hemos lanzado una federación que aglutina por primera vez a sectores transversales del turismo azul para conseguir alinearnos mejor y trabajar con la Administración.