"Un parque de viviendas viejo, poco confortable e ineficiente"

Un manual de instrucciones para hacer fácil lo difícil. Es la premisa de la Guía Vecinal de Rehabilitación de viviendas, editada por el Consejo Superior de Arquitectos de España (CSCAE) y la Confederación Estatal de Asociaciones Vecinales (CEAV). La publicación llegó este sábado a la Región, donde fue presentada en el Colegio Oficial de Arquitectos (COAMU) de la capital.

El documento surgió para «hacer comprender a la ciudadanía las necesidades de uso y el potencial de mejora de las construcciones y favorecer las iniciativas de rehabilitación energética», explicó a La Opinión el secretario del CSCAE, Laureano Matas, quien intervino en el acto junto a la decana del COAMU, María José Peñalver; la directora general de Vivienda y Arquitectura del Gobierno regional, María Dolores Gil; el edil de Urbanismo de Murcia, Antonio Navarro Corchón; y la representante de la CEAV, Margarita García. «Contábamos con complejas guías de redacción de proyectos, pero los propietarios, inquilinos y promotores necesitaban algo que les hiciera entender la importancia de la rehabilitación», añadió Matas.

La decana del COAMU definió el parque de viviendas como «viejo, poco confortable e ineficiente». Con esta Guía «amable y de fácil lectura», cualquier vecino o asociación podrá conocer los pasos a seguir de un proceso que suele ser complejo en lo técnico y farragoso en lo burocrático.

El detonante de una rehabilitación, que puede ejecutarse por fases, suelen ser derramas inesperadas, problemas de accesibilidad, facturas elevadas… Por ello, lo primero es consultar a un arquitecto o visitar la Oficina de Apoyo a la Rehabilitación del COAMU para ser asesorados.

Algunos de los beneficios que referencia la Guía para quienes deciden rehabilitar viviendas son el aumento de su valor, la mejora de la salud, la comodidad, la habitabilidad y la accesibilidad, y el ahorro energético en las facturas. Por otro lado, se colabora así con el cumplimiento de aquellos compromisos a nivel nacional y comunitario encaminados al cuidado medioambiental, como el Pacto Verde, la Agenda 2030. Por ello, hablar de rehabilitación hoy también es hacerlo de fondos europeos, «la nueva Bauhaus donde la arquitectura tiene un papel fundamental» para crear, mediante la renovación, «espacios más sostenibles, inclusivos, bellos y éticos».

En ese sentido, Navarro Corchón recordó que el Ayuntamiento murciano se ha sumado, en el marco el acuerdo bilateral entre el Gobierno de España y la Región, al programa de rehabilitación de barrios, donde se distinguen dos entornos: los 28 barrios del cinturón del casco urbano y las pedanías. «La primera fase supondrá la inversión de 7,5 millones de euros, 5,6 millones en ayudas, y permitiría rehabilitar 450 viviendas», indicó, asegurando que en breve saldrá la convocatoria. «Las subvenciones son hasta del 80%, pudiendo ser hasta el 100% para las personas vulnerables».

«Es posible que, en poco tiempo, veáis una Murcia y muchos municipios regenerados y espacios públicos más bonitos», expresó la directora general. Que pidió a la ciudadanía y a las comunidades de propietarios que «no tengan miedo a rehabilitar, fondos hay aunque van en dirección de poder agotarse». E insistió a los interesados a informarse en el COAMU o en la propia Consejería porque «la rehabilitación, cuando finaliza, el valor que queda es tan elevado que el coste es casi efímero». Eso sí, pide al Gobierno central, como todas las autonomías, que «el plazo de obra dure mínimo un año más, al ser actuaciones muy grandes».

La gestión administrativa y burocrática tanto de la rehabilitación como de las subvenciones es tan importante como la parte técnica, que debería ser «exitosa, rápida, ágil y cercana, que no defraude al que lo intenta y no desanime a quien quiera seguir», según Matas. Pero reconoció que a nivel general es «tediosa, aburrida, larga y desesperante», por lo que pidió dotar a las administraciones de mayores recursos para manejar las subvenciones.

Riesgo de colapso

Por su parte García, asimismo arquitecta de profesión, alertó que de más de 10 millones de viviendas en España antes de 1980 sin «prácticamente» normativa acústica, estructural o energética, un millón de ellas se encuentran en riesgo de colapso. «Si la gente supiera que los edificios se calculan para una vida útil de cincuenta años, se tomaría más seriamente la rehabilitación», subrayó. E indicó que de ninguna manera es competencia para la promoción de obra nueva, sino que la complementa. Y puso el foco sobre la falta de vivienda pública: «Su número es muy bajo, y en algunos lugares ni siquiera hay viviendas de emergencia». Y propuso que el Estado adquiera patrimonio inmobiliario de la Sareb u otras entidades para destinarla a usos sociales.

«Como generación, debemos dejar a quienes vengan unas ciudades y un planeta más limpio, sostenible, confortable y más respetuoso, y no podemos negar que en la actualidad tenemos unas urbes con muchísimo recorrido en el ámbito de la rehabilitación», manifestó Mata. Y avisó: «El precio de la energía es insoportable y lo seguirá siendo durante años, debemos intentar que nuestros edificios demanden la menor cantidad posible». Y es que, la rehabilitación y el mantenimiento de edificios, «tal como hacemos con nuestros automóviles», han venido para quedarse, concluyó.