Tirón de orejas de Cáritas al Gobierno regional por la Renta de Inserción

El secretario general de Cáritas de las Diócesis de Cartagena, Francisco Sánchez Baeza, lamentó ayer el descenso del número de personas que se han visto beneficiadas por la Renta Autonómica de Inserción en la Región de Murcia, que pasó de alcanzar a más de 19.000 murcianos en 2019, a tan solo 5.700 personas en 2022, cayendo el gasto ejecutado en 11 millones de euros.

El Ingreso Mínimo Vital (IMV), por su parte, llegó en 2023 a más de 30.500 hogares, lo que supone a más de 101.700 personas en la Región. Al respecto, apuntó que, «sabiendo que la calidad de empleo no es a día de hoy la que todos desearíamos, es necesaria que la presencia del IMV no haga morir uno de los pilares del sistema de protección autonómico como es la Renta Básica de Inserción».

Sánchez hizo estas declaraciones durante la rueda de prensa posterior a su comparecencia ayer ante la Comisión Especial de Estudio de lucha contra la pobreza y la exclusión social en la Región de Murcia, celebrada en la Asamblea, donde subrayó la «necesidad de elaborar una estrategia a largo plazo y permanente que trate de erradicar esta lacra que vivimos en la Región de Murcia», en referencia a que el 31% de su población se encuentra en condiciones de pobreza, según lo establece la tasa Arope (sobre riesgo de pobreza o exclusión social). Además, más de un 11% de los murcianos se encuentran dentro de los indicadores de pobreza severa (175.000 personas).

Si bien reconoció que los datos de empleo han mejorado en los últimos años, desde Cáritas consideran que la situación «dista mucho de ser la óptima», especialmente por el problema estructural de la temporalidad. La vivienda, dijo, también se ha convertido en una lacra para las clases más humildes.

También denunció que «existe una desigualdad territorial evidente en relación a las políticas sociales». Según los datos que maneja, el 53% de los municipios murcianos no permiten el acceso a ayudas económicas de emergencia a personas en situación irregular. «Es imprescindible que se coordinen las políticas entre las tres administraciones», declaró, al tiempo que pidió a las distintas fuerzas políticas que abandonen el «ruido político».

El diputado regional del Partido Popular Miguel Ángel Miralles defendió que «las políticas de Fernando López Miras han sacado de la pobreza a más de 103.000 personas en la Región en los últimos siete años», siendo esta comunidad la que «más ha reducido los índices de pobreza a nivel nacional».

La secretaria de Servicios Sociales del PSOE en la Región y diputada regional, Toñi Abenza, recogió el guante de Cáritas y pidió al Gobierno regional que complemente «ya» el Ingreso Mínimo Vital con la Renta Básica de Inserción para combatir «el monstruo en el que se ha convertido la pobreza y la exclusión social en la Región». Considera que los datos son «demoledores», ya que «8 de cada 10 adultos que padecen hoy riesgo de pobreza o exclusión social, ya lo padecieron cuando fueron niños y niñas».