Fomento quiere dedicar fondos de la UE a acabar edificios en esqueleto

El consejero de Fomento e Infraestructuras, José Manuel Pancorbo, quiere que los fondos Next Generation puedan dedicarse a terminar los edificios que quedaron inacabados tras la crisis de 2008 para hacer viviendas de alquiler asequible. Pancorbo ha planteado la propuesta a la titular de Vivienda y Agenda Urbana, Isabel Rodríguez, en la Conferencia Sectorial celebrada esta semana. Su pretensión es que estas estructuras se beneficien del ‘Programa 6’ y que las ayudas puedan emplearse para financiar su terminación. 

El departamento de Pancorbo añade que «numerosos consejeros del PP se mostraron a favor de la propuesta» y confía en que «en futuras reuniones bilaterales se pueda concretar». También precisa que «el Ministerio tomó nota».

Durante el encuentro con los responsables de Vivienda de las comunidades autónomas la ministra anunció la distribución de 430 millones del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) a los gobierno autonómicos para la construcción de casas asequibles y para la rehabilitación. 

Según informó el Ministerio tras la Conferencia, estos 450 millones «van dirigidos, fundamentalmente, a la rehabilitación de viviendas, de edificios públicos y de espacios urbanos, así como a la construcción de vivienda asequible y eficiente». El departamento de Isabel Rodríguez también anunció que el acuerdo fue adoptado por unanimidad.

Las ciudades de Murcia y Cartagena conservan todavía algunas torres levantadas en los tiempos del boom inmobiliario, que con el paso de los años se han convertido en un vestigio de la crisis que provocó el estallido de la burbuja inmobiliaria hace 16 años.

En la capital de la Región las más conocidas son la torre existente junto al tanatorio de Espinardo, que iba a albergar un edificio de oficinas, y la de Miguel Indurain, que fue levantada por una empresa perteneciente a las hermanas koplowitz con la pretensión de construir un hotel de lujo en el nuevo ensanche situado cerca de la zona de Las Atalayas. 

En ambos casos se trata de edificaciones que no fueron autorizadas para la construcción de viviendas, sino que tenían licencias de obras para otros usos diferentes, tal y como recuerda el presidente de la Asociación de Promotores Inmobiliarios, José Ramón Blázquez, quien ve la iniciativa como «una buena medida».

Blázquez apunta que al ser edificaciones no residenciales sería necesario tramitar un cambio de uso del suelo y defiende que en estos casos «los ayuntamientos tendrían que ser más flexibles». 

Fuentes de Fomento señalan que al tratarse de una Conferencia Sectorial «no se ahondó en los detalles de la iniciativa del consejero», aunque sugieren que «la propuesta es aplicarla inicialmente en edificaciones residenciales para no tener que modificar el uso del suelo».

La Consejería ha recibido casi 3.000 solicitudes para rehabilitación

Fomento ha recibido casi 3.000 solicitudes para optar a las ayudas del programa de rehabilitación de viviendas. De las 2.982 peticiones de ayudas, 1.506 corresponden al programa de barrios, que acapara más de la mitad, según ha informado la Consejería en una nota de prensa.

También destaca que se ha conseguido incrementar la dotación destinada al Programa 3 (de rehabilitación de edificios) en tres millones de euros, por lo que pasa de seis a nueve millones.

El comunicado añade que «la principal novedad respecto a estas ayudas en cuanto a la mejora de la eficiencia energética es que se resolverán en una sola fase tanto la concesión como el pago». 

 El consejero de Fomento, José Manuel Pancorbo, indica que en la Conferencia Sectorial de Vivienda «se ha puesto de manifiesto la excesiva burocracia que tienen todas las solicitudes de ayudas de fondos Next Generation.  Hemos pedido que la burocracia se simplifique para que los ciudadanos puedan obtener las ayudas de forma más sencilla y los funcionarios puedan tramitarlas de una manera más ágil. Nuestro objetivo es que lleguen a la ciudadanía lo antes posible».