El contrato del agua de San Javier de 247 millones llega a la Fiscalía

El mayor contrato del Ayuntamiento de San Javier enfrenta a dos grandes compañías, Aqualia, que está participada por FCC y el fondo australiano IFM Investors, y la actual concesionaria del suministro del agua potable y del alcantarillado, Hidrogea, que pertenece al grupo Agbar. Ambas aspiran a llevarse una concesión para los próximos 20 años que ha salido a concurso en 247 millones de euros y que ha dado lugar a una denuncia ante la Fiscalía por parte de Pleamar, uno de los partidos que le disputan la Alcaldía al actual regidor, José Miguel Luengo.

También ha provocado una reclamación de la actual concesionaria, porque considera que la oferta de Aqualia estaría «holgadamente por encima del límite de temeridad» y recuerda que esta circunstancia podría ser causa de exclusión del concurso.

Según ha informado Luengo, la oferta de Aqualia alcanza en total los 89 millones, mientras que Hidrogea recoge en su propuesta una aportación de unos 60 millones. 

En el escrito que Pleamar ha dirigido a la Fiscalía no se formula ninguna acusación contra ningún cargo público, sino que aporta un dossier con informaciones publicadas en algunos digitales nacionales, en las que se ponen en duda las valoraciones de la Mesa de Contratación, que ha dado a Aqualia la máxima puntuación en la oferta técnica. 

En el documento se alude también a la participación de la consultora Ingeagua como asesora externa en el proceso de licitación, aunque la decisión última corresponde a los técnicos municipales, señalando que sus servicios fueron contratados sin ninguna licitación mediante un contrato menor. Las informaciones recogidas en el dossier también apuntan que muchas licitaciones públicas en las que intervino esta consultora suele ganarlas la empresa que ha obtenido la mejor puntuación en San Javier.

No obstante, Pleamar plantea a la Fiscalía que el concurso podría haber incurrido en «conflicto de intereses, tráfico de influencias, competencia desleal, concurrencia de precedentes, selección arbitraria de cargo público con posible discriminación positiva, incompatibilidad publico privada y antecedentes de presunto cohecho y prevaricación». 

La elevada valoración de la oferta técnica obtenida por la compañía del grupo FCC dejaría fuera de juego al resto de licitadores, incluida Hidrogea, que difícilmente podrían compensar la puntuación de Aqualia con sus condiciones económicas. La Mesa de Contratación ha atribuido a esta empresa 49 puntos, mientras que Hidrogea tiene 44. La tercera mejor puntuada ha obtenido 37,75 puntos, por lo que queda a mucha distancia.

La actual concesionaria ha presentado una reclamación al Ayuntamiento contra las puntuaciones del concurso, en la que plantea que la oferta de Aqualia puede estar «por encima del límite de temeridad» e incluso incurrir en un motivo de exclusión de la puja.

El alcalde defiende que no se ha adoptado todavía ninguna resolución definitiva sobre el concurso y da por hecho que el proceso de adjudicación será lento. Luengo apunta que al tratarse de «un contrato goloso» es normal que haya disputa entre los licitadores. Pide paciencia y recuerda que la contrata actual estará en vigor hasta noviembre.

Asegura que otras dos empresas, además de Aqualia, han presentado ofertas elevadas y explica que la compañía del grupo FCC ofrece una aportación que contempla mayores inversiones en la red de suministro y de alcantarillado del término de San Javier y de la parte de La Manga que pertenece al municipio, además de la renovación de los contadores de los usuarios. Recuerda que el Grupo Socialista ya presentó un recurso al Tribunal de Contratos, que fue rechazado.

 Por su parte, el director de Aqualia en la Región de Murcia, Higinio Martínez, ha negado que pueda establecerse ninguna relación entre esta compañía e Ingeagua. Recuerda que la compañía tiene las concesiones de San Pedro del Pinatar y Los Alcázares y se compromete a renovar «unos 40.000 metros de redes de abastecimiento y 75.00 metros de alcantarillado», con «una inversión 80 millones en la renovación de las infraestructuras».