Política
La presidencia del Congreso pide a Francisco Bernabé que "rectifique sus graves imputaciones con desprecio a la verdad"
El senador por la Región de Murcia relaciona en sus mensajes a Meritxell Batet con el 'caso Mediador', también conocido como 'caso del Tito Berni'
Meritxell Batet y Francisco Bernabé. / L.O.
Francisco Bernabé, senador del Partido Popular por la Región de Murcia, ha recibido una carta de la presidencia del Congreso de los Diputados en la que se le insta a rectificar mensajes compartidos en redes sociales en los que difunde "imputaciones graves". Con ello hace referencia al tuit en el que el murciano dijo que Meritxell Batet "primero permitió que el 'Tito Berni' se llevara a su casa el teléfono y el iPad propiedad de la Cámara y después destruyó los registros de todas las visitas que recibió en las Cortes", a colación de un artículo publicado en El Debate: "¿Cómo se llama a eso? ¿Encubrimiento?".
El popular fue uno más de los 15 parlamentarios de su partido que utilizaron esta vía para pedir explicaciones a la socialista Batet: Agustín Almodóbar, José Ángel Alonso, Jaime de Olano, Juan Antonio Callejas Cano, Macarena Montesinos, Paloma Gázquez, Pablo Hispán, Belén Hoyo, Pércival Manglano, Javier Merino, Rosa Romero, Ana Vázquez Blanco y Ana Zurita y Elías Bendodo.
Además, en referencia a la información publicada en numerosos medios de comunicación en la que se apunta que la Policía encontró 13 sobres en la casa de Tito Berni con dinero en efectivo, el senador también se pronunció en su cuenta de Twitter: "Miles de euros escondidos en sobres en su casa tenía el jeta del Tito Berni. ¿Conocía algo la presidenta sanchista del Congreso de los Diputados? Recordemos que ella impidió que la Policía pudiera investigar su teléfono móvil o que se supieran las visitas que recibía en las Cortes".
La respuesta de la presidencia del Congreso, la tercera máxima autoridad de España, ha sido enviar una carta a todos ellos, con fecha del 13 de abril, para reprocharles todas esas "acusaciones y deprecio a la verdad". El escrito dice lo siguiente:
"Estimado Sr. Bernabé:
La divulgación a través de su perfil de Twitter de afirmaciones que suponen la imputación a la presidencia de la Cámara de la comisión de una actuación pretendidamente delictiva constituye una grave quiebra del respeto que merece la institución.
La actuación de la Presidencia de la Congreso de los Diputados y de los servicios de la Cámara se atiene en todo momento a lo previsto en la Ley y el Reglamento. En el marco del tratamiento de datos personales de las visitas, la normativa aplicable determina que la conservación de los datos se mantendrá durante no más tiempo del necesario para los fines para los que fueron recogidos. En el caso del control de acceso a las instalaciones de la Cámara, la finalidad de la recogida de datos no es otra que la preservación del orden y la seguridad de las personas y bienes, conservándose esa información durante un mes, del mismo modo como se procede en el caso de las imágenes de videovigilancia. La aplicación de esta regla de conservación por parte de los servicios de la Cámara se desarrolla con absoluta normalidad.
Espero que esta precisión le permita rectificar sus afirmaciones y no mantener, con conocimiento de su falsedad o con un claro desprecio hacia la verdad, imputaciones graves a la presidencia del Congreso de los Diputados".
El propio Francisco Bernabé ha contestado públicamente a este mensaje, de nuevo por redes, en las que ha dado a conocer que "la presidenta sanchista del Congreso de los Diputados" le exige por carta "que rectifique lo dicho sobre su posible encubrimiento del Tito Berni". "Pues lo lleva claro. Solo he comentado noticias dadas en prensa sobre su sospechoso proceder. Las explicaciones debe darlas ella", ha sentenciado.
Caso Mediador
El caso Mediador es una trama de corrupción que salpica al PSOE, y que estaba encabezada por el exdiputado Juan Bernardo Fuentes, el general de la Guardia Civil Francisco Espinosa Navas y el empresario Marco Antonio Navarro Tacoronte.
También conocido como el caso del Tito Berni, consistía en ofrecer facilidades a empresarios en la contratación pública a cambio de cantidades de dinero o de favores, por ejemplo, con inspecciones. A ello se suma las fiestas que estarían relacionadas con este asunto, en las que se habría contratado a prostitutas y consumido alcohol y drogas.
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