La ola de solidaridad con el pueblo ucraniano no pierde fuelle y el envío de ayuda humanitaria desde la Región de Murcia o con la colaboración de empresas y particulares murcianos no cesa. A las iniciativas puestas en marcha por parte de las universidades, empresas, colectivos vecinales y sociales, se ha sumado ahora el popular sacerdote murciano Joaquín Sánchez, que colabora en una de las acciones que está realizando la plataforma Caravana por la Paz, con la colaboración de la Coordinadora Unitaria de Bomberos Profesionales.
«El pueblo ucraniano está sufriendo la guerra, las muertes, el sufrimiento, la destrucción, el éxodo y la violación de los derechos humanos; condenamos, por tanto, la invasión a Ucrania por Putin», señala a La Opinión el cura murciano desde Rumanía. Explica que lo que lo que ha hecho la plataforma es «facilitar el transporte de la ayuda humanitaria, en este caso, la mercancía recogida por la asociación Hambre Cero, desde Madrid hasta Rumanía».
El convoy en el que ha viajado Joaquín Sánchez está formado por dos camiones cargados con 48 toneladas de medicinas, ropa y alimentos y llegó el pasado jueves a su destino, Tulcea, una población al sur de Rumanía, a unos 10 kilómetros de la frontera con Ucrania.
La intención del sacerdote murciano, una vez allí, es permanecer varios días en la zona, donde hay instalados varios campamentos de refugiados «para echar una mano en lo que haga falta».
