El edificio de usos múltiples de Alfonso X, en Murcia, acogía este lunes por la mañana el acto de entrega de los reconocimientos Menina 2021, con los que la Delegación del Gobierno distingue la labor de personas e instituciones implicadas en la lucha contra la violencia de género. Este año, las distinciones han sido concedidas al Colegio de Psicología de Murcia, la Secretaría de Gobierno del TSJ y la boxeadora de Puerto Lumbreras, Mari Carmen Romero.

Javier Parra, secretario de Gobierno del Tribunal Superior de Justicia, comentó a los medios, antes del comienzo del acto, que "la Justicia en su conjunto, jueces, letrados, funcionarios, y también los abogados, hacemos un gran esfuerzo" para luchar contra esta lacra. "Los letrados de Justicia somos los anestesistas de los quirófanos", dijo, para explicar que su función, en el entramado judicial, queda a veces en un segundo plano, aunque es indispensable. "Estamos especialmente orgullosos" de la distinción.

"La psicología es una práctica con vocación de servicio público en la misión del desarrollo de sociedades más justas", dice Fuster

Recordó que hay en la Región "tres juzgados de violencia sobre la mujer, dos en Murcia y uno en Cartagena", además de "otros nueve juzgados que están asumiendo sin dedicación exclusiva la violencia sobre la mujer". En este sentido, destacó que "los juzgados mixtos no especializados tienen un 1% más de órdenes dictadas que los especializados de Murcia y Cartagena".

Mari Carmen Romero, por su parte, manifestó que “es una alegría estar aquí, sentir que soy una imagen para la mujer”. A su juicio, en la lucha por la igualdad "todavía queda, sobre todo en mi deporte", el boxeo, en el cual "estoy rodeada siempre de hombres". No obstante, dejó claro que siempre ha sido "muy respetada" por sus colegas varones.

En su opinión, "aún queda por trabajar". "Yo entreno todos los días para tener un hueco en un deporte tan masculino", precisó la lumbrerense, que aspira a "ser otra vez campeona de Europa e ir al mundial".

Para los más vulnerables

Por otro lado, María Fuster, decana del Colegio de Psicología, detalló en el acto que este órgano "se pon al servicio del Observatorio regional de Igualdad, para seguir trasladando las contribuciones fundamentales de la psicología, haciendo realidad los principios de la cogobernanza". 

Resaltó que "tendrán toda nuestra colaboración y todo nuestro saber a su disposición", dado que "la psicología es una práctica con vocación de servicio público en la misión del desarrollo de sociedades más justas e igualitarias".

Manifestó, asimismo que "la ciudadanía lleva tiempo confiando en nuestra labor y demandando nuestros servicios. Desde la crisis sanitaria provocada por la pandemia es un clamor. Hemos de nuevo constatado que, el tándem 'vulnerabilidad y crisis' es igual a revictimización".

A este respecto, admitió que "este premio llega en un momento especial, dando paso al reconocimiento institucional, conscientes de que queda mucho por alcanzar en el compromiso de facto para integrar a los profesionales de la psicología en todos y cada uno de los servicios públicos llámense sanitarios, educativos, judiciales, emergencias y en tantos otros, donde la prevención y la vulnerabilidad hablan de necesidades psicológicas". 

“Miedo y vergüenza es lo que debemos hacer sentir nosotros a los agresores, pero no el miedo brutal, salvaje e irracional que ellos infligen, sino el miedo justo, implacable e irreversible de la justicia, del rechazo, la condena y el aislamiento social”, subrayó el delegado del Gobierno, José Vélez, en su intervención en el acto.