«Por desgracia, tiene que haber desgracias para que se aumenten los recursos de Protección Civil». Lo tiene claro Pedro Hernández Hernández, hasta octubre de 2020 jefe del Servicio de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Mazarrón. Ya está jubilado, y recuerda perfectamente sus más de 30 años («desde 1984 en el cargo») al pie del cañón en materia de emergencias en la localidad costera, que en septiembre de 1989 sufrió una de esas tragedias que marcan un antes y un después: las inundaciones del camping de Bolnuevo

Pedro Hernández fue uno de los cuatro profesionales en materia de emergencias que compartió Cinco minutos de vivencias ayer en un acto que se celebró en el Archivo Regional, para celebrar los 40 años del distintivo de Protección Civil en España. Pasado, presente y futuro de Protección Civil en la Región de Murcia

Así quedó el camping de Bolnuevo tras las inundaciones en 1989. L.O.

Fue «la verdadera puesta de largo», por razones de fuerza mayor, de un servicio que había arrancado un lustro antes. Aquel 7 de septiembre, una gran riada arrasó el camping: dos mujeres perdieron la vida en la catástrofe. El cuerpo de la primera apareció a las 48 horas; el de la segunda, a los veinte días. Por aquel entonces «ni siquiera teníamos parque de Bomberos, pero sí teníamos camiones: teníamos tres, nos los dio la Comunidad», rememora Hernández, al tiempo que apunta que «funcionarios del Ayuntamiento iban como voluntarios, con un buscapersonas», para atender las urgencias. 

A raíz de la tragedia de Bolnuevo "se empezó a entender" que había que invertir en emergencias

Aquel día se movilizó la Armada, ya que «no teníamos nada, una ambulancia local con conductor y poquito más». Apunta a la «suerte» que tuvieron de que hubiese «una compañía del Ejército haciendo maniobras en la playa de Percheles.

Un miembro de Protección Civil de Molina de Segura ayuda en las tareas tras el devastador terremoto de Argel. L.O.

El antiguo jefe de Emergencias comenta que «cuando se estaban rescatando los coches, había un trabajador del camping que no decía nada, se limitaba a mirar. Al sacar un vehículo, dijo que era su coche, si podía abrirlo él. Ese hombre estaba esperando porque dentro del coche llevaba la paga del mes». «Estaba el dinero mojado, metido en un sobre dentro del coche», afirma Pedro Hernández.

Hoy en día, en Mazarrón, «tenemos cuatro ambulancias, dos de ellas medicalizadas, y un parque de bomberos, con cuatro o cinco camiones, aunque ya va siendo hora de que el Consorcio se plantee un poco ampliarlo», detalla el exjefe del servicio. A raíz de la tragedia de Bolnuevo «se empezó a entender» que había que invertir en emergencias.

"No podía quitarme de la cabeza que algún vecino hubiera perdido la vida", dice Sergio Gil de las inundaciones

Por su parte, Sergio Manuel Gil, jefe del servicio de Emergencias y Protección Civil del Ayuntamiento de Los Alcázares, comenta que las inundaciones en este pueblo, las de 2016 primero y las de hace dos años después, «van a condicionar la redacción de los planes de emergencia» de la zona.

Sergio Manuel Gil. L.O.

«Como voluntario y posteriormente como profesional, he tenido la oportunidad de poder vivir infinidad de experiencias no solo en la parte operativa de una gran emergencia, también en la parte de gestión de la misma; así pude conocer como se organizó en el año 1993 la llegada de los más de 400 refugiados bosnios de la guerra de la antigua Yugoslavia, en donde, desde Los Alcázares se colaboró en algunas actividades bajo la dirección de la Unidad de Protección Civil de la Delegación General del Gobierno; el incendio de Moratalla, el incendio de la Aliaguilla en Cuenca, el terremoto de Lorca, incendios en la Peña del Águila y Monte de Las Cenizas, el hundimiento y la afectación medioambiental del Prestige, y por su puesto las inundaciones acaecidas tanto en el 2016 como en el 2019 junto a las danas sufridas por el municipio de Los Alcázares», destacó.

Reconoce que, en lo peor de aquello, «tuve momentos de ansiedad, queríamos que parara de llover, queríamos conocer qué estaba ocurriendo aguas arriba del municipio; la información que nos estaba llegando de barrios y urbanizaciones... no podía quitarme de la cabeza que algún vecino hubiera perdido la vida».

Uno de los más veteranos en lo suyo es José de Moya, presidente de la agrupación de Voluntarios de Protección Civil de Cehegín: «Yo llevo desde que se fundó en septiembre de 1983, quizás sea de las personas más veteranas», comenta a LA OPINIÓN. 

A los 25 voluntarios de su agrupación "los trato como hijos míos", dice José de Moya

A sus espaldas, «incendios en Moratalla, en Ricote… hemos colaborado en el Prestige, cuando el accidente, hemos colaborado con otras agrupaciones, montamos el grupo de rescate subacuático en la Región de Murcia y montamos el grupo subacuático de Palma de Mallorca. Los adiestramos y se montó allí», desgrana.

De Moya lleva «23 años trabajando con Casa Real y Presidencia del Gobierno», aunque «hasta ahí puedo leer». A los 25 voluntarios de su agrupación «los trato como hijos míos», confiesa. «Soy el más veterano, en julio del año que viene me jubilo, yo creo que ya está bien», comenta al respecto.

Personas luchan en primera línea contra las llamas. L.O.

A la pregunta de qué es lo que más le ha impactado de estos años, manifiesta que «es cuando tienes que sacar a personas que han muerto en el agua, sobre todo, cuando son niños». 

De Moya tiene claro que los voluntarios son «gente que se merece un homenaje». «Y nadie se acuerda de ellos, muchos ya han fallecido», lamenta. «Esa gente se merece que hablen de ellos, tenerlos en la memoria». 

Acto y distinciones

El Gobierno Regional celebró ayer, en el Archivo Regional, un acto de reconocimiento al colectivo de Protección Civil por sus 40 años de entrega. En el acto, la vicepresidenta, Isabel Franco, valoró que «los voluntarios y profesionales de Protección Civil no dudaron en colaborar achicando agua, limpiando barro, llevando comida» en catástrofes como seísmos e inundaciones, lo cual «es una gran demostración de solidaridad».

Un momento del acto de este viernes en el Archivo. CARM

Por su parte, el consejero de Seguridad y Emergencias, Antonio Sánchez Lorente, dijo en el acto de ayer en el Archivo Regional que «el voluntariado de Protección Civil ha jugado siempre un papel importantísimo y nos obliga a potenciarlo, asumiendo el deber de formación de los voluntarios». Apuntó que la Región «cuenta con más de mil voluntarios repartidos entre las 40 agrupaciones existentes».

«Durante 2022 pretendemos que vea la luz nuestra mayor apuesta: la creación del Centro de Investigación y formación en Seguridad Ciudadana y Emergencias de la Región de Murcia», adelantó el consejero.