Los costes de producción de los áridos procedentes de las canteras que se destinan a las obras de construcción se han encarecido un 30%, según los cálculos del presidente de Afarem, José García-Balibrea, que ayer fue reelegido para los próximos cuatro años en la asamblea general de esta asociación. Afarem, que agrupa a unas 40 empresas de la Región, que generan unos 1.500 empleos directos e indirectos, analizó ayer la situación de este sector.

García-Balibrea mostró su preocupación por la elevada repercusión que la subida de los precios de la energía eléctrica y de los carburantes tiene en las empresas dedicadas a la extracción, la molienda y el transporte de los materiales de construcción que producen.

Cree que los fabricantes aún no han empezado a repercutir el encarecimiento de sus costes de producción a las constructoras, aunque prevé que no tendrán más remedio que hacerlo a partir del año próximo. «Un metro cúbico de hormigón lleva dos toneladas de áridos», precisó. El presidente de Afarem señaló que este aumento se sumará al encarecimiento de los precios de otros materiales de construcción, como el acero o el aluminio, que también arrastran grandes subidas, lo que está provocando que «la obra pública se ralentice y que la iniciativa privada se frene».

Destacó igualmente las dificultades que deben afrontar las empresas dedicadas a la extracción ante «los problemas generados por la burocracia ambiental». García-Balibrea recordó que la UE aboga por el aprovechamiento sostenible de los recursos minerales más cercanos para reducir su impacto.