Tener una mascota en casa conlleva una gran responsabilidad y, a juzgar por las tasas de abandono animal, es evidente que no todos los ciudadanos la asumen. Tal vez por eso, desde la Dirección General de Derechos de los Animales, perteneciente al Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 de Ione Belarra (Unidas Podemos), pretenden impulsar un «gran cambio cultural sin precedentes» a través de una nueva Ley de Protección Animal que «acerque a España al estándar medio europeo», explica a LA OPINIÓN la portavoz de Podemos en la Asamblea Regional, María Marín.

La futura norma, todavía como Anteproyecto de Ley, está siendo objeto de duras críticas en la Región de Murcia por algunos de sus polémicos puntos. Uno de ellos hace referencia a la prohibición de vender animales en tiendas. Alicia Ayala, presidenta de la protectora de animales de Las Torres Oh My Dog, considera que esta medida ayudará a reducir los índices de abandono. «Nosotros recogemos de la calle a perros monísimos de tiendas, como pomeranian o chihuahuas. Está claro que para una persona adinerada lo más fácil es ir a una tienda, gastarse mil euros y comprarle a sus hijos su capricho». Si se aprueba la ley, la cría y venta sólo podrá realizarse por profesionales registrados y se obligará a la esterilización de los animales que habitualmente vivan en espacios abiertos y puedan relacionarse con otros animales de la misma especie. Criaderos oficiales, protectoras y perreras municipales serán las vías a las que acudir para llevarse a casa una mascota. Este proceso podría llevar aparejado que el dueño tenga que realizar al animal un seguro desde el primer momento.

La cría y venta sólo podrá realizarse por profesionales registrados y se obligará a la esterilización

María Marín recuerda que con la última modificación del Código Civil «los animales dejaron de ser cosas, para convertirse en seres sintientes, por lo que hay que actuar de forma consecuente».

A la presidenta del Colegio de Veterinarios de la Región de Murcia, Teresa López, le parece que no hay «ningún problema» en vender animales en tienda si estos están supervisados por profesionales de este colectivo. «¿Y sí se pueden vender peces, es que no tienen sentimientos?», se pregunta. Desde el Colegio alertan de que el Anteproyecto está poniendo «en frente» a todos los sectores y la propia López duda de que se ajuste al bienestar animal, por lo que adelanta que presentarán alegaciones al texto. «Para elaborar una ley hacen falta conocimientos y conocimiento; es decir, saberes científicos y sentido común, y no parece que haya mucho en esta norma tal y como está ahora mismo», asegura.

También le ha sorprendido la introducción de una formación para la tenencia de animales. «Me preocupa más que un alumno pase de curso con varias asignaturas suspensas», enfatiza la representante de los veterinarios murcianos. Sin embargo, desde la protectora, Ayala opina que «a más de uno no le vendría mal un cursillo, ya que a muchas personas les suena a chino que a una mascota no se la puede dejar sola varios días». En la misma línea, la dirigente morada, María Marín, que desarrolló su trayectoria profesional en una clínica veterinaria antes de meterse en política, cree que de esta manera también se busca «que los perros de caza dejen de ser considerados como un grupo aparte». En este sentido, denuncia haber visto muchos de estos canes «encerrados en zulos durante una semana comiendo pan duro».

El PP, con la actividad cinegética

Sin duda, el colectivo de los cazadores es el que más se siente atacado por el desarrollo de la norma. Francisco Bastida, presidente de la Federación de Caza de la Región de Murcia, denuncia que la Ley de Protección Animal es «un ataque en toda regla contra la actividad cinegética», por lo que ya están preparando una movilización el próximo 20 de marzo con el objetivo de «paralizar el borrador».

Bastida acusa al Gobierno de España de «amparar» a «animalistas radicales» como Sergio García Torres, director general de Derechos de los Animales, al que acusa de estar al frente de un «chiringuito». En su opinión, está legislando sobre animales «gente que no sabe de campo» que está guiada por una «moda contemporánea». «La vida rural es algo más que el jardín de enfrente de mi casa», dice, y recuerda que su actividad sostiene 185.000 puestos de trabajo directos en España y que mueve en la Región de Murcia 400 millones de euros al año.

La norma murciana ya recoge el sacrificio cero

El borrador de la Ley de Protección Animal también incluye el sacrificio cero, una medida que ya recoge la Ley de Protección de los Animales de Compañía de la Región, de 2017. Se prohíbe el sacrificio de animales de compañía y solo se autoriza por razones sanitarias o eutanásicas. 

También ha llamado la atención la implantación de un DNI animal, un medida que viene a reforzar la obligatoriedad el microchip que ya existe en la Región. En este caso, en caso de pérdida de animal, la mascota quedará contemplada en un registro estatal y no solo por comunidades. Precisamente, desde Podemos creen que la ley resuelve el problema de la dispersión de normas diferentes sobre bienestar animal en toda España.


El vicesecretario de Política Territorial del Partido Popular, Antonio González Terol, natural de Cartagena, denunció este mes que la ley de Protección de los Animales «persigue prohibir la caza por la puerta de atrás». Y sostiene que «lo hace de la forma más sibilina posible, como es prohibiendo que los propietarios privados de animales de compañía puedan tener más de cinco, lo cual hace imposible que existan las realas de perros», advirtió.

Desde Podemos esperan que los perros de caza dejen de ser considerados un «grupo aparte»

Asegura que la norma «toca de muerte las monterías y los recechos tan importantes en los municipios con aprovechamientos cinegéticos» y lamenta que el Gobierno quiera acabar con una practica de la que «viven carniceros, realeros, secretarios, postores, forestales y por la que los propios ayuntamientos reciben ingresos».

Marín (Podemos) asegura que en el Anteproyecto «no hay ninguna intención de prohibir, pero hay cuestiones que caen por su propio peso», en relación a que los cazadores que quieran desarrollar su actividad con perros «tendrán que cuidarlos».

Las claves

No podrán vivir en terrazas y patios

 Los propietarios deberán «mantenerlos integrados en el núcleo familiar, en buen estado de limpieza». No podrán dejarlos en terrazas, patios o sótanos, ni en vehículos cerrados, expuestos al calor o al frío, ni atados a las puertas de un establecimiento.

Curso formativo

Todos los dueños de los perros deberán superar un curso formativo «con el objetivo de facilitar una correcta tenencia responsable». Asimismo, un animal de compañía no podrá estar solo tres días consecutivos y, en el caso de los perros, el plazo no podrá ser superior a 24 horas.

Prohibido criar y vender en tiendas

Ningún particular podrá criar sus propias mascotas. La cría y venta sólo podrá realizarse por profesionales registrados. Esto implica que dejarán de venderse mascotas en tiendas y que se obligará a la esterilización de los animales que habitualmente vivan en espacios abiertos. Asimismo, se prohibirá su exhibición y exposición al público con fines comerciales, excluidos los peces.

Fin a los perros peligrosos

La ley considera que ningún animal es peligroso por su raza y que los perros deben ser valorados individualmente. Se elimina la lista de perros peligrosos, «sin perjuicio de que, reglamentariamente, se establezcan las condiciones en que deberían manejarse, previa realización de un estudio de sociabilidad».