Ismael Galiana ha fallecido en la madrugada de este domingo a los 88 años, tras una vida dedicada al periodismo y la gastronomía. Su hijo Ismael anunció el fallecimiento de Galiana, quien estuvo en todo momento acompañado por su mujer, Conchita, y sus hijos.

Ismael Galiana, durante años colaborador de La Opinión como cronista gastronómico, deja un legado de más de cincuenta libros, todos ellos referidos a la Región de Murcia, y una larga carrera como periodista en diarios como La hoja del lunes y Línea.

Padre de ocho hijos, su tarea como crítico gastronómico comenzó en 1965 reseñando el libro Entre bocado y trago, de Juan García Abellán. A partir de ahí llegaron sus propios libros y miles de artículos, reseñas y entrevistas, gracias a los cuales Galiana realizó un auténtico atlas de la gastronomía murciana. Escribió sobre locales en grandes ciudades, pero también de pequeñas pedanías y barrios que muchas veces resultaban desconocidos. En 2013, con motivo de su 80 cumpleaños, el periodista recibía un homenaje de las asociaciones gastronómicas de la Región en las que si algo se remarcó fue su papel para divulgar como nadie el papel de la gastronomía murciana.

Entre sus libros, destacan los títulos Productos de Murcia, Nuestra cocina, Placeres de la mesa, 50 nuevas recetas de la cocina de Murcia, Bodegas y queserías de la Región de Murcia y Guía gastronómica de la Región de Murcia.

A su labor de crítico gastronómico en el diario La Opinión de Murcia durante se añaden también los libros El río Segura, Guía secreta de Murcia, Cartagena y Mar Menor, Guía secreta de Murcia, Murcia imaginada e Insólita Murcia, entre otros títulos.

Su cuerpo será velado en el tanatorio de Jesús de Murcia y su entierro tendrá lugar este lunes, tras una misa funeral a las once y media de la mañana.