Los autobuses que sustituirán a los trenes de Cercanías de Lorca y Águilas se estrenan hoy con trece viajes menos de los habituales debido a la huelga de los maquinistas. Los trenes circularon ayer por última vez en esta línea, que permanecerá cerrada al menos durante los próximos tres años, si se cumplen los plazos establecidos por Adif para acabar las obras del AVE entre Murcia y Lorca. El Administrador de Infraestructuras y el Ministerio de Transportes aducen que mantener la circulación ferroviaria mientras se construye el nuevo trazado de Alta Velocidad a Almería retrasaría la obra e impediría al Gobierno financiarla con los fondos Next Generation. Los viajeros de Águilas harán el trayecto hasta Murcia en dos autobuses distintos con un transbordo en Lorca.
Ni las protestas que se han venido produciendo a lo largo de todo el verano ni el rechazo de las instituciones de la Región han podido evitar que Adif suspenda el tráfico ferroviario a partir de Alcantarilla. Anoche salió el último tren desde Murcia y desde Lorca a las 22.22 horas. Desde Águilas, que tiene tres conexiones diariarias en cada sentido, la última salida se produjo a las 19.19 horas.
Los viajeros que utilizan el tren para desplazarse en el corredor de Murcia a Águilas no solo tardarán más en llegar a su destino con el autobús, sino que hoy sufrirán los mismos recortes que el resto de los usuarios de Renfe a causa del paro convocado por el sindicato de maquinistas SEMAF.
De los 16 trenes que circulan diariamente en ambos sentidos, hoy se cubrirán once con autobuses entre Murcia y Lorca y ocho entre Lorca y Murcia, atendiendo a los servicios mínimos establecidos para la jornada de paro, que cubren el 75% de las frecuencias en horas punta y el 50% durante el resto de la jornada. En total, circularán 19 autobuses en lugar de 32 trenes.
El sindicato que ha convocado la protesta tiene previsto continuar la huelga la próxima semana, aunque los paros no durarán toda la jornada.
En el tramo entre Lorca y Murcia el viaje en autobús durará unos 20 minutos más, mientras que en los trenes de Águilas el trayecto llegará a alargarse una hora en algunos viajes.
Los autobuses contratados por Renfe para trasladar a los usuarios de la línea pararán en las estaciones del trayecto, aunque en algunas poblaciones la parada se ha situado fuera por acuerdo con los ayuntamientos. Así, pararán en el Camino de Los Romanos en Alcantarilla, la avenida de las Fuerzas Armadas en Librilla, la carretera del Hinojar en La Hoya, la avenida de Europa en Lorca (correspondiente a la estación de San Diego), la calle José Espinosa Pomares de Lorca (estación de Sutullena), la avenida de Águilas de Almendricos y el Barrio de Jaravía en Jaravía (provincia de Almería).
El trayecto se cubrirá con dos rutas de autobús, una semidirecta, que parará en Alhama de Murcia, Totana y Lorca San Diego, y otra con paradas en todas las estaciones del corredor. Los usuarios se han quejado de que ya no podrán subir los viajeros en silla de ruedas ni las bicicletas.
A partir de febrero, cuando empiecen las obras de soterramiento de Barriomar, también quedará cerrado un tramo de la línea entre Murcia y Alcantarilla, lo que impedirá la llegada y la salida de trenes desde la estación del Carmen a Madrid por Chinchilla. Renfe busca un apeadero alternativo para la partida y la llegada de los viajeros, que podría situarse en la estación de mercancías de Nonduermas.
