El concurso de la televisión autonómica 7 TV es la patata caliente que el exconsejero de Economía, Hacienda y Administración Digital, Javier Celdrán, ha dejado en herencia a su sucesor, Luis Alberto Marín, que era su secretario general cuando el anterior responsable de las arcas regionales anunció por sorpresa la decisión de dejar el Ejecutivo.

También se atribuyen a las complicaciones de la licitación del canal autonómico las dificultades que encontró el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, para encontrar sustituto a Javier Celdrán, quien comunicó su marcha el 25 de junio, pero no fue relevado en el Ejecutivo regional hasta el 20 de julio, casi un mes después.

Las anomalías en la concesión que el Gobierno regional sacó a concurso apenas un mes y medio antes de la fecha prevista para que la nueva adjudicataria iniciara sus emisiones, a pesar de que el proceso requiere al menos un año, han provocado de momento un recurso ante el tribunal de Recursos Contractuales, que obligó a eliminar una cláusula del pliego de condiciones. Además, el Servicio de la Competencia de la propia Comunidad Autónoma ha abierto expediente a la anterior concesionaria, Secuoya, por abuso de posición dominante.